BCCCAP00000000000000000000553

Aun más encontrada con la op1mon de los teólogos y de la ma– yoría de los juristas, que iban a llevar la voz cantante contra Villal– pando, sería la actitud de los miembros de la facultad de artes Judas Tadeo Ortiz, Mateo Lozano, Francisco Sampere y el agustino José Díaz, bien que su insignificancia numérica y su dispersión en los ramos de tan heterogénea facultad (humanidades, retórica, matemáticas, a más de filosofía) les restaría fuerza y cohesión. A ellos se unirían Francisco Ibáñez, diputado, y Andrés Ponte, consiliario. Del Trilingüe, en fin, acudieron los doctores José Cartagena, anti– guo catedrático de hebreo, y su sucesor Gaspar González de Candamo 9 • 6. La filosofía moderna, en el banquillo Junto con su rector López Altamirano, los citados claustrales emi– tirían el fallo de Salamanca a una de las grandes instancias españolas en la última parte del siglo XVIII. Esa particularidad privilegiada y el modo cómo se iba a desen– volver el debate harían de este claustro uno de los más ruidosos en la historia moderna de la universidad y, sobre todo, en la de las pos– trimerías de su antiguo régimen, aunque pensamos que no ha sido aún justipreciado en su verdadera trascendencia. Esta especie de «concilio» damnatorio no surgió de improvisto, ni por accidente. En el ánimo de muchos venía preparándose de tiempo atrás. Si la confidencia del rector a Campomanes responde a la verdad, ya el año anterior la elección de los censores había constituido un triunfo neto del partido peripatético más fuerte y, en realidad, el único superviviente como tal. En esta magna asamblea podía ahora cosechar, al más alto nivel, los frutos de lo entonces discretamente sembrado. Lo indudable es que el mundo escolástico allí prevalente no des– perdició la ocasión de someter a juicio a la filosofía moderna, tanto o más que al autor que la personificaba. Su victoria sería, además, una gesta típica de las masas intelec– tuales sobre sus minorías. Aquéllas querían convertir el paraninfo de 9. AUSal L. 241 f. 238. Puede verse en ese lugar la lista completa de asis– tentes al famoso claustro. Para compararla con la total de «Doctores v Maestros de esta Universidad», cf. ibid., L. 483 f. 4, correspondiente al curso ·1779-1780. Sobre datos biográficos de muchos de esos claustrales teólogos, cf. D. S. REY. Catálogo de catedráticos de la facultad de teología de Salamanca en el siglo XVIII. en Salm 9 (1962) 243-368. 43

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz