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PADRES. ;\IADHES. ESPOSOS 43 eran ni tan puras ni tan mansas, pues acababa de asesinar, en defensa de su honor ciertamente, a Scarpia. Pero Mario Caravadosi canta a estas manos de mujer hechas "para aca– riciar niños, para coger rosas y para rezar juntas por las desventuras". Las manos de una madre son de lo más sagrado que hay en este mundo. Pero necesitan emplearse en "acariciar ni– ños", o mejor, en cuidar niños. Mientras la mujer que ha sido madre no polarice su vida en dirección a sus hijos, no habrá entendido nada de la su– blimidad de su misión. En algún sitio he leído lo siguiente: "El renombrado filó– sofo americano Emerson consigna un episodio interesante que presenció viajando en un autobús. Un día bochornoso de verano subió cansado y sin humor a un coche de línea. Con tedio iba realizando su viaje ... de media hora. Con el mismo sopor, y sin pensar en nada, estaban sentados tam– bién los demás viajeros del coche ... , cuando en una de las paradas subió una mujer joven con su hijito, de cabellos rubios y ojos azules. Apenas se hubieron sentado en un rin– cón del coche, cambió del todo el humor de los pasajeros. Como si todas las preguntas, sonrisas, carcajadas del ino– cente niflo trajesen el aire del paraíso perdido a los hombres cansados por el camino fatigoso de la vida. Y la madre sostenía con tanto encanto y amor a su hijito y le hablaba con tal cariño, que la mirada de todos se clavaba en ellos y un calor extraño derretía los corazones, sumidos antes en la indiferencia." El autobús que los astrónomos llaman "tierra" iba co– rriendo hacía ya millares de años con millones y millones de viajeros: hombres agotados, maltrechos, sumidos en la indolencia, que ni sabían adónde iba el coche... , cuando un día subió a él, hace dos mil años, una Madre joven... con un Niño ... , allá en Belén. Y la escena del mundo cambió. En el transcurso de los siglos han subido al autobús, que es la tierra, ustedes, mamás que me leen, y han subido con sus hijos-con ese niño que a estas horas está tal vez intri– gado sobre el posible regalo que le va a hacer el "Día de la madre"-. ¿Se parecerán ustedes-usted y su hijo-a aque– lla Madre joven que con un Niño en los brazos apareció a.Ha en Belén, hace ya mil novecientos sesenta años? ...