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oscilaciones politicas «democráticas» y «republicanas», y hasta de orienta– ciones presidencialistas. En la reciente de Reagan, partidario de «la mayoria moral» o la nueva derecha: Un grupo de senadores ha presentado un proyecto de ley, the chastity bill (la ley sobre la castidad). «No, Tommy; no quiero hacerlo», dice por teléfono una joven– cita. El monólogo televisivo sigue así: «Sabes que te quiero, pero eso no quiero hacerlo de ningún modo ... (pausa) No me importa que todo el mundo lo haga. No tengo por qué darte una razón. Es mi decisión personal». Una voz en off dice seguidamente: «Si te es difícil decir no, háblalo con tus padres y escribe a la campafia «Decir no,» ofreciendo una dirección y un teléfono». Este anuncio de televisión, de treinta segundos, defendiendo la virginidad de las jóvenes, puede verse en varias de las cadenas de TV de Nueva York. Ha sido producido por el Bureau of Com– munity Health Services (Oficina de Servicios Comunitarios de la Salud) con fondos destinados a la planificación familiar. La campafia de televisión «Say no» (decir no) es sólo la parte más visible de un proyecto general para controlar y reprimir la sexua– lidad de los jóvenes. Este esfuerzo se ha visto plasmado en el proyecto de ley «Chastity». «Se trata de un programa par ayudar a las jóvenes, antes de que tengan que acudir a la contracepción o al aborto», explica un miembro del subcomité de Vejez, Familiar y Servicios humanos, del Senado, en apoyo de la ley. «El propósito de la misma», afiade, «es disminuir la relación sexual entre los jóvenes, no sólo para evitar los embarazos, sino para preservar la salud y la moral de nuestra juventud. Hay que frenar de algún modo la precocidad sexual que cada día es más alarmante en nuestro país». El portavoz del Senado es muy probable que conozca los resultados de «Cosmo report,» un libro que es best-seller en estos momentos en Estados Unidos, escrito por la periodista Linda Wolfe. En él se recogen los resultados de una encuesta a 106.000 mujeres norteamericanas sobre sus relaciones sexuales, realizada para la revista femenina «Cosmopolitan,» que es leída por dos millones y medio de personas. Este investigación abarca un espectro bastante mayor que el Informe Hite, que sólo estudió el comportamiento de 3.000 mujeres. Según el Cosmo report, el 21 OJo de las jóvenes tuvieron su primera relación sexual antes de los quince afios; el 690Jo la tuvieron entre los dieciséis y los veinte afias, y un 90Jo, entre los veintiuno y los veinticinco afios. 721

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