BCCCAP00000000000000000000550

por la aguijada de los bueyes. ¿Por qué, Padre? Yo he venido a la tierra como Hijo de Dios; y estoy sufriendo dolores como hombre. Pena. Esto tiene que ser porque así se intentó. Pero, ¿por qué? (No Greater Lave)... Jesús con la cruz (Solil. de XTO) ¿Qué es esto? Mi propia muerte. Será terrible. Ya, lo sé. Es abrumador. Aspera cruz, confusión y pena. No me explico por qué me rodea toda esta gente. ¿Qué es lo que alguna vez he hecho para que tales multitudes tengan que verme morir? Alguien me golpea. Puede ser un hombre o un animal. Todo está contra mí. No puedo llevar esta cosa mucho más, esta cruz. Tendrán que llevarme. Es una tortura opresiva, atroz. Mis propias manos están horribles. No volverán a ser manos. Ampollas en mis espaldas y en mis pies. A donde se me dice que tengo que ir, iré. No hay otro camino hacia mi Padre. Carry - Llevar. Reconocemos y adoramos tu Divinidad y tu Humanidad, silencioso y triunfador en la quietud de la cruz y en el sepulcro hacia la aurora de la resurrección, hacia la Pascua eterna de las flores, de los árboles flam– boyantes y de los conejillos y huevecitos, dulces repintados con lentejuelas de pétalos y sonrisas de niño, y, más tarde, Pascua de Rosa, de lenguas de oro y alas del Espíritu Santo. ¿Qué cuáles son nuestras incomunicaciones secretas, silencios resen– tidos y ausencias de tus templos; qué significan nuestros gritos de animales de ira y en el celo; y por qué nuestras fugas a los pantanos de las drogas con la desesperanza y frustración de nuestras dialécticas de barbarie? Tú sabes que nos devora la curiosiad, como en el paraíso, nos apasionan las noticias hasta reinventar el mal, para tenerlas; nos cansa y asusta en cambio vivir la 599