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destruir los campamentos y expugnar las ciudades fortificadas. En esta situación, una vez, lanzándose el furor enemigo contra Asís, ciudad particular del Señor, y avecinándose ya el ejército a las puer– tas, los sarracenos, gente pésima que tiene sed de sangre cristiana y osa los más descarados crímenes, cayeron sobre San Damián, den– tro de los límites del lugar; mejor dicho, dentro del claustro de las vírgenes. Se deshacen los corazones de ias Damas a causa de !os temores, tiemblan por el horror las palabras y llevan a la Madre sus llantos. Ella, con impávido corazón, ordena que la conduzcan, enferma como estaba, hasta !a puerta y que la pongan delante de los enemigos, precediéndola la caja de plata, contenida dentro de un marfil, en la que se guardaba con suma devoción el Cuerpo del Santo de los Santos. Y luego que se hubo postrado de bruces en oración al Señor, con lágrimas habló a su Cristo: «¿Te place, mi Señor, ¡eh!, entregar en manos de paganos a tus esclavas inermes, a las cuales he criado en tu amor? Guarda, Señor, te ruego, a estas tus siervas, a las cuales no puedo defender en este trance». En seguida, desde el propiciatorio de la nueva gracia, una voz como de infantillo se dejó sentir en sus oídos: «Yo siempre os defenderé». «Mi Señor-añadió-, protege tam– bién, si te place, a esta ciudad que nos sustenta por tu amor.» Y Cristo a ella: «Soportará molestias, mas será defendida por mi forta– leza». En esto, la virgen, levantando el rostro bañado en lágrimas, conforta a las que lloran diciendo: "Hijitas, con seguridad os preven– go que no sufriréis nada malo; basta que confiéis en Cristo». Sin tar– dar más, de repente, la audacia de aquellos perros, reprimida, se empavorece, y, escapándose de prisa por los muros que habían esca– lado, fueron dispersados por el valor de la suplicante. A continuación, Clara, a aquellas que habían oído la voz referida, les conmina prohi– biéndoles con seriedad: uHijas carísimas, guardaos de todas maneras, mientras yo tenga vida, de revelar a nadie aquella voz». de Santa Clara 21-22.J 35
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