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el CU'll hace el día y nos da la luz. Y es bello y radiante con grande esplendor; de Ti, Altísimo, lleva significación. Loado seas, mi Señor, por la hermana luna y las estrellas; en el cielo las has formado claras, y preciosas, y bellas. Lqado seas, mi Señor, por el hermano viento, y por el aire, y nublado, y sereno, y todo tiempo, por el cual a tus criaturas das sustentamiento. Loado seas, mi Señor, por la hermana agua, la cu,¡I es muy útil, y humilde, y preciosa, y casta. Loado seas, mi Señor, por el hermano fuego, con el cual alumbras la noche, y es bello, y jocundo, y robusto, y fuerte. Loado seas, mi Señor, por nuestra hermana madre tierra, la cu;il nos sustenta y gobierna, y produce diversos frutos con coloridas flores y hierbas. Loado seas, mi Señor, por quienes perdonan por tu amor y soportan enfermedad y tribulación. Bienaventurados los que las sufren en paz, pues de Ti, Altísimo, coronados serán. Loado seas, mi Señor, por nuestra hermana muerte corporal, de la cual ningún hombre viviente puede escapar; ¡ay de aquellos que mueran en pecado mortal! Bienaventurados aquellos que acertaren a cumplir tu santísima vo- pues la muerte segunda no les hará mal. [!untad, Load y bendecid a mi Señor y dadle gracias y servidle con gran [humildad. Posteriormente, en ocasiones diversas, añadió las dos estro– fas siguientes: Alabado seas, Señor mío, por todos cuantos por tu amor padecen enfermedad y tribulación, y por tu amor perdonan fas ofensas. Los que esto hicieren, benditos por Ti serán, en verdad; mucho más si procedieren hermanados con fa paz, pues por Ti, Altísimo, coronados serán. (Espejo de perfección C-CI.) Entre Francisco y Clara las relaciones llegaron a veces a la transparencia de la telepatía, como sucedió al acercarse la muer– te del Santo. 33 3