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](i2 P. Jl"STO DE VILLARES, O. F. M. arte y de la ciencia. El furor comunista no se ha limitado a matar Obispos y millares de sacerdotes, de religiosos y religiosas, buscan– do de modo especial a aquellos y aquellas que precisamente trabajan con mayor celo con po– bres y obreros; sino que han hecho un núme– ro mucho mayor de víctimas entre los seglares dP. toda clase y condición ... , por el mero hecho de ser buenos cristianos o tan sólo contrarios al atP.ísmo comunista. Y una destrucción tan es– pantoc;;a la lleva a cabo con un odio, una bar– barie y una ferocidad que 110 se hubiera creído en nuestro siglo" (16). * * * Protestantismo El protestantismo es asimismo un gr::m ene– migo de la esperanza cristiana, aunque él se llame cristiano. En efecto, "confundiendo la fe con la esperanza, cltribuye a ésta una certeza absoluta e infalible: porque es la fe, según los protestantes, la fe fiducial o confiada, por la cual el alma fiel cree firmemente con certeza absoluta e infalible que ella está justificada por Cristo, que obtendrá la perseverancia fi– nal, que es del número de los elegidos y, por lo tanto, que infaliblemente se salvará". (16) Div. Redempt., n. 20. p. f'.'.i4. Cr>1. cit.