BCCCAP00000000000000000000534
LA SANTA CASA EN LORETO. 73 Santa Casa. En la parte exterior de la Santa Casa fué levantado un altar adosado al muro, en el que se r-elebraba el Santo Sacrificio de la Misa cuando la multitud de fieles no podía colocarse dentro del sa– grado recinto. Las primeras hospederías eran ya insuficientes, y la ciudad para suplir su falta hizo construir dos pórticos que sirvieran al mismo tiempo para conser– var los donativos y votos, que siendo tantos no ca– bían ya en la capilla. Un célebre pintor de aquel tiempo recibió el en– cargo de grabar sobre las paredes la representación de los misterios realizados en la Santa Casa y la historia de su traslación milagrosa; y por último, al lado de estos pórticos se edificaron casas destinadas á los encargados del servicio del santo lugar y de ·vigilar por su guarda y cuidado. La invasión de Italia por _ el Emperador Enri– que VII había despertado en Hecanati los odios an– tiguos entre los güelfos y gibelinos. Estos, que llegaron á ser más fuertes en 131a, i-aquean y destruyen el palacio del Obispo Federico y las casas de los güelfos; destierran á más de 500 de sus adversarios; roban en 1315 el Tesoro de Lore– to, tiranizando al país hasta 1:n9. En este año el marqués Amelius de Lautrec, g·obernador de la provincia en nombre de la Santa Sede, les envía á su sobrino Ponce, mariscal de las Marcas, para tratar de sumisión al Soberano Pon– tífice. Ponce, después de ser bien acogido por la ciu– dad, es alevosamente asesinado con los 300 hombres que le acompañaban y los güelfos que creyeron po– der entrar con él. Los gibelinos no perdonan ni á los niños ni á las mujeres; violan los conventos; dan fuego en la
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz