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244 VIAJE Á TIERRA SANTA. de alerta á los piadosos corazones para que vengan á salvar el tesoro del Carmelo, y con sus limosnas alivien la triste situación de los que se hallan dis– puestos á derramar su sangre (yo entre ellos) antes de permitir les usurpen y destruyan la casa que les dejó su buena Madre. Suplico á Vd., Sr. Director, permita tengan esta por suya todos los periódicos religiosos y políticos de esa corte que se precien de espaiioles. Y dando á todos las gracias, queda de Vd. afectísimo seguro servidor y Capellán P. Lommzo DE 1\fo1LIKA, Misionero Apost6lico. CAPÍTULO XLII. DE MONTE CAR111ELO Á BEIRUT. Después de haber descansado en tan dichosa mansión Ralí parn Beirut, por la costa del l\foditemi– neo, que dista 27 horas. El primer punto que visité fué San Juan de Acre; en este lugar estuvo el Apóstol San Pablo predicando; se llama la antigua Tolemaida, donde tantos combates se han dado y tantísimas muel'tes ha habido. Nuestro Padre San Francisco de Asís vino á San Juan de Acre en bus– ca del martirio, y el Sultún en lugar de martirizar– le lo recibió con gran contento, le protegió, ofre– ciéndole cuanto quisiera de su reino; en vista de esto el P. San Francisco huyó después de haberle predicado el santo Evangelio. Tiene esta ciudad 8.000 habitantes; la mayor parte son musulmanes; reside en ella un Obispo griego católico; la parroquia está servida por Padres

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