BCCCAP00000000000000000000534

DE N.\l'OLES a\ ALEJANDRÍA. 173 y venerar los Lugares consagrados por la vida, los milagroR y la muerte del Hombre Dios. 2.º Heribir los peregTinoR que vienen á viRitar la Tierra Santa, dándoles todo::s lo::s bienes que necesitan eRpiritnales y materiales. 3.º Predicar sin cesar el Santo Evan– gelio, allí mismo donde fué inaugurado por Nuestro Señor Jesucristo. Esta triple misión la cumplen los Padres Fran– ciscanos, principalmente en las localidades donde se hallan los santuarios, y son al mismo tiempo pá– rrocos y adminiRtradores de Sacramentos. En Jeru– salén, por ejemplo, ellos son todo á la vez: gnarclia– neR del Santo Sepulcro, misioneros, curaR, médicos, farmacéuticos y hospitalarios; adenuís, rllos dirigen las C:'cuelas de obreros, recogen los huérfanos, sos– tienen las viudas y pobres, dúndoles habitación y alimentos. La cuRtoclia Franciscana ele Tierra Santa, además ele la casa principal que tiene en Jerusalén, cuenta con el convento del Noviciado en Nazarot, el de los Filósofos en Belén, el de Hnmanidados en San Juan (montaña de Judea) y el de Teología en el rouvento del Salvador, de Jernsalón, que es donde reside el Reverendísimo Padre Cm,toclio de Tierra Santa, de Egipto y Siria. Los principales conventos donde dan hospitalidad de gracia á los peregrinoR, se ha– llan en Jaffa, Damle, Jcnrnalén, Belén, San Juan de la montaña de Judea, Emaüs, Nazaret y Tiberíades. Los Padres de Tierra Santa no se hallan hoy, des– graciadamente, en posesión ele todos los santuarios de que antes lo eran. Después de haber sido expul– sados del Santo Cenáculo, arrojados de la iglesia ele la Asunción. sepulcro de la Santísima Virgen, im– pedidos de decir la Misa en el lugar venerable del nacimiento del Salvador, son expuestos á perder el derecho secular de la celebración de los Divinos Ofi-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz