BCCCAP00000000000000000000534

110 LA VIRGEN DEFIENDE se CASA Y RIQCEZAS. »y contento desde que llegó á mis manos la santa »piedra: se, por lo tanto, que es voluntad de la San– >)tísirna Virgen devuelva la referida piedra para ob– >)tener la salud ..... Yo te suplico la recibas y colo– »ques con gran veneración, en el mismo lugar don– »de fué arrancada; deseo sea fija con un cerco de >)plata, corno prueba del milagro y para eterna me– »rnoria del hecho. Te suplico además que des cuen– »ta de este portento al Soberano Pontífice Pio IV y »al Cardenal Patrón de Loreto, para que confirme la »censura eclesiástica contra los violadores del San– >>tuario de Lorcto ..... Rogad, en unión de todos los »Sacerdotes y fieles que se hallen en Loreto, á la »Santísima Virgen, para que benignamente me per– »done todo aquello que por parte mía haya habido »de error ó de culpa, por mi indiscreta devoción ..... »Dado en Trento á 7 de Abril, año 15G2. ffi JUAN, Omsro DE Cornnr .A.ll Esta carta original fué enviada á Roma y depo– sitada en los Archivos del Vaticano, donde Martore– lli la vió en el siglo pa::iado, como él mismo cuenta. y una copia auténtica se conserva en Loreto en el armario de la Santa Casa. Durante el mes que siguió á este milagro acu– dieron á la Santa Casa cincuenta mil personas á ver y besa-:.- esta piedra para siempre célebre. El P. Riera dice que presenció el acto de arran– carla y el de su restitución, y oyó de los labios del mismo Stella la relación de todo lo ocurrido en Trento. No hay duda que la Santísima Virgen es Madre de misericordia y cuando se ve obligada á ejercer su justicia lo hace sin reparo. Si hiere es para curar, y los castigos que impone llevan comunmente el remedio en sí mismos.