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- 44 .... Si Dios mismo puso en el corazón d~ todas las m'adres tesó– ros inmensos de amor, ternura l:l' misericordia para con sus hijos según la came, ¿qué volcanes a,e a:mOir, rím .y .océanos die miseí– ricordia no pondría !:J' escond-2ría en ~l inmaculad'o !:J' purísimo Corazón de la que El mismo constituy:ó Ma_dre y Reina de mise– ricordia !:J' :de ¡amor? ¿R:ecuerdas, a:m:ado jov,en lo que ha sido y1 .es para ti tu cariñosa madne? ¡Ah! Me dirás: mi madre siempre tuvo para mí corazón de verdadera madre. A ella ,acudo y1 me defiende, me consuela, me alienta, me estrecha entve sus brazo,s, me reoorr– c;ilia con mi p,adlre, si alguna vez fuí ingrato !:J' mal hijci.•• Pr,iJ– mera, segund!a, tercera y, cuarta v,ez y siernpr-e acud!o a. mi que·– rida madre, y: cada vez la encuentro más m·acJ!r,e !:J' más enamo- rada de este hijo ingrato... · Bien dices y1 aun te quedas corto en ponderar el amor y la misericordia de la madre que te trajo a este mundo. · Pues ahora, amaq 1 o. mío, piensa y: cree: que el amor, la de– licadeza, )a bondad', la miserioo,rdia y1 compasión del_ corazón de todas Las madres que hubo y1 habrá ,en la carrera de los si– glos, resumido en un so1o corazón, no iguala, ni en nada s,e pa:– rece o asemeja al amor, bondad, ,compasión !:J' misericordia rjel dulcísimo y1 amantísimo Corazón de la Ma:d!re de Dios para con nosotros, pobres pecador,es. La misericordia de la Virgen María¡no es otra tosa que la misericordia de Dios encarnada en ,el Corazón die una Madr,e divina. María está llena d¿ todas las misericordias, porque ,es buena, porque es santa, porque es Mad!r,e, porque sufrió mucho, porque ama mucho, porque imtta a Dios, el cual hace nacer su sol sob,,e buenos y malo.s, J' llover sobre ;ustos y p,ecadores (San Mateo, 5 45). ¿Qué más? Si la Virgen echa una m'iré(d!a a Dios, ve ,que El es Padre de los misericordisos; si mira ,a '~U divino Hijo Jeisu• cristo, -escucha que le d!iGe: Yo soy el buen pastor. El buen pas-,– tor sacrifica su vida por sus ov,e;as (San Juan, 10, 11). Si se mira a sí misma, se reconoce constituíd'a Medianera, Corredentora !:J! Madre de tod!o el género humano. Si se fija en nosotros, pobres pecad!ores, no ve sino flaquezas, caídas, ,exc– travíos lamentables !:J' to,dla ·clasie de culp,as !:J' ofensas de Dios. ¿Qué madre tiene corazón para ver perecer a sus hijos y, no hace cuanto puede por evitar su ruína? Joven querido: Acudamos siemp,re a la Santísima Virg,en; porque, como Jesucristo es med!iador para con el Eterno Padre, así la Virgen lo es para con Jesús, que hizo die su Madre canal de la divina gracia, puerta d'el cielo,, am:paro !:J' salvación de los hombres. Arna y, hon11a: ,a la Virge/n:, y te irá bien. Procuremos complacer a ,esta Augustísima .Señora, viviend!o siempre ,en gracia de Dios !:J' nunca cáídos en culpa grave. Cuid!a de comulgar en sus fectividad!es .y,, si te e_s posible, todos los sábados, consagrados a su honor. Aconseja eso mis~ mQ a tus amistades. Jamás omitas el rezo del Santo Rosario y, las tres Avemarías al levantarte !:JI acostarte. El siguiente ejem!– plo te confirmará en ,ese propósito.

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