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ia vida de la Virg1en fué vida die amor die DLos y, die Cáridad para con el prójimo1. Nadie lo duda . . 9.º Ni cesó de ser caritativa cuando s,e fué al ciel,01; por,– que ahora conoce inás y1 mejor nuestras necesidades, como dice el mismo San Buenaventura. Dijo ·el Señor a Santa Brígida: «Sin las oraci,01nes, e intercesión de mi Mad,re, np. quedaría al hombre ni siquiera la esperanza de alcanzar misericordia. 10. Joven amado: Llena está la historia de millo:nadas, de muchas millonadas de eje'mp,los que publican la caridad de esta Reina de bondad y1 miserico1rdfa. · Prueba, en comp,endio1, los motivos de su caridad para con nosotros: 1.º Ama mucho ,a los holntlbtes, p,orque ama .mucho a Dios. 2.º Nos ama, piorque es ·precepto del Señor el amor al pró– jimo. 3.n Nos ama, µ,arque al .morir Jesucristo la encomendó que nos amara como a hijos. · l!.º Nos ama, porque sOnros el precio de la sangre de su divino Hijo. 5.º Nos ama, porque somos hijos de sus .dolores. 6.º Nos socorre, defiende y1 cuida de nosotros, por lo rnt– trañablemepte que nos quiere. 7 ·º María Santísima ,es toda bo.ncl!adí, caridad' Y' solicitud, aún con '1os negligentes, ingiratos y, p,ecador,es; pero, lo es ,esp,e– cialmente para los que la aman, hon[r,aln y1 a 'EiJ:la se ,encom'iccndan. Sé tú v,erdadiero devoto suy10 1 y palparás su caridad y: am- p:aro. · BJEMPLO.-Refiere Sar Ligorio, que hubo en Milán ,un ju– gador lLamado Masanio, . tan p,erdidlo y1 exaltadlo por el juego, que un día jugó y1 'perdió hasta los v,estidos. Eibrio de oóüim y1 de desesp,eración tomó un cuchfüol Y' ,apuñal,ó. con él una ima:– gen de la Santísima Vir,g:en Ma'ría. De La herida saltó un fuerte golp1e de sang•r,e que le roció la cara. Movido luego al arrepentimiento .y1 compLtnc.ión de su pe– cado comenzó a Jlorar y1 a r,eprender 1 sie a sí mi:s'mo, dando gra~ rtias ,a la ,Madre de Dios p,o¡rque 1e había dispensado tanto fa:– vor y1 tiemp;o ·par.a hacer penitencia. Buscó ·un confesor e hizo con:tesiótn g,en,eral de todas sus culpas. Deseando más y más :aplacar a Dio1s, abandonó el mundo y, se hizo. religioso Cisterciens,e, llevando ,en el mó:tl\asterio vida . muy: perfecta de oración · íJ de penite,ncia, favoreciéndole el, Señor con el don de p,rofccía. Después de cuarenta afias de vida muy1 perfocta y: santa, murió l]enci de p1az, contento y1 confianza en el Señor. (Glorias de María n.º l!3). ¡ Oh lnmac.uliada Virgen María! 111\,iradme cO!n oj,os d;e bondad. Haced que nunca me olvide de Vo,s, y1 Vos no os· olvidéis de mí. Os ofrezoo y, consagro para siempre mi allma Y' mi cuer'p.o,