BCCCAP00000000000000000000528
mal sr, ejecuta 011 virtud ele PSil alabanza la persona que b da se hace responsable de toda la maldad del acto. Esta co– operación y responsabilidad PS frecuentísima actualmente eH la juventud Íemenina, ora alabando un acto represible. un vestido de la amiga que en conciencia no es lícito usaL ura criticando o ridiculizando la conducta cristiana de otras per– sonas. «Te está rnonísimo». le dice a la amiga cuando le con– sulta sobre su bafrndor, y C'Sa palabra mágica para la v,mi– dad femenina es motivo para que desaparezca toclo escrú¡m– lo en portarse ele modo tan escandaloso. CoopPrÓ efican,w11- te al pecado ajeno y su cooppración siguP actuando ~<'hre el mal hasta tanto que rectifique de modo que anule el efoctCJ malo de su imprudente alabanza. En esto se cumple el re– fr{m: «Unos comen la fruta y otros padecen la dentera:'>. La joven tiEme que ser muy mirada sobre este peligro quP lr amenaza de cooperar al mal del prójimo. Hay pecado de cooperación cuarnlo conociendo y (1,>bien– do impedir un mal no se hace. Para qne exista obligación e,1 conciencia en este caso se requiere que Pl rnal no lo pueda evitar la persona interesada sin nuestra qne no otra persona qne lo pueda hacer y crea rm:onablemente qlw lo hará, y que por evitar Pl pecado ajeno no nos un mal grave. La cnridad comienza por uno mi,rno. SECAND1-\ El más frecuentp pecado de cooperación lo cometen las jóvenes con el esdmdalo. El escándalo es nnn invitación muda al pecado. Los teólogos lo definen como acción exter- 30
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz