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Hubo un tirmpo rn el que SPr cnsl1c1110 era considerado suprema ignom1ma; para la sociedad pagana ser cristiano era simplemente admirar y seguir a un aju.,ticiado. En cam– bio de esta actitud, los cristianos primitivos entregaban gozo– sos su vida a la muerte más horrenda por no perdPr la ria de su nombre. Hoy han cambiado bastante las cosas: para muchas jóvenes ser cristiana es menos que ser bonita, valoran más un vestido de última moda. Sin embargo de esta mentalidad actual y dPI pen ,1ll1H'll to antiguo del paganismo, ser cristiano es rl honor ,umo él que purde ascender y aspirar un hombre en la tierra. e-; Li categoría última ele la dignidad hummw, porque ser cfr-– tiano es ser divino, es posePr belleza ele Dios, bienes ele Dio-. naturaleza de Dios. El cristiano tie11e un derecho reconoci– do a llegar a un día a participar del gozo de Dios: el rnicn;,, bien que hace a Dios foliz, llf'narú los sPnos insondables d,,J alma clel cristiano. Aun mús: el cristiano es familiar de Dios. es hijo de Dios y heredero con Jesucristo de sus pro– pios bienes eternos. ¿,Qm\ honor y suerte comparnhlPs a es– tos? El cristiano posee como suyo el mayor tesoro: Dios. Por esto nunca se puede ,·a·,onablemente renunciar a ser cris– tiano, siempre se pierde :,- sp pierde tanto que aunque por ello se ganara el mundo eutero, quedaría en déficit rn ha– ber. Creer. sentir y ha, ta experirnentar esta grandeza cons– tituye en la tierra b meta codiciada de todo seguidm· dr' Cristo. 1G