BCCCAP00000000000000000000526

3.-Es grave la obligación de asistir a Misa el día del Señor Los domingos, así como los días festivos de precepto, tenemos grave obligación de asistir a la Misa íntegra, fiel y devotamente. Es deseo de la Iglesia que se haga en forma comunitaria en la que todos tomemos parte activa, orando, cantando y dando gracias conjuntamente, en verdadera unión de intención y corazones. Para ello facilita el uso de la lengua ordinaria en cada pueblo. Debemos, también, escuchar atenta y devotamente la Palabra de Dios que, al mismo tiempo que nos sirve de mayor instrucción y tema de oración, nos une a los sentimientos e intenciones de la Iglesia universal. 4.-Participando en la Eucaristía La Constitución citada, en los números 47 y 48, insiste en que evitemos el ser «extraños y mudos espectadores» y que, puesto que en la Eucaristía renovamos la Alianza, damos gracias, adoramos y alabamos a Dios Padre por Jesucristo; y es sacramento de piedad, signo de unidad, vínculo de caridad, banquete pascual, en el cual se recibe como alimento a Cristo, el alma se llena de gracia y se· nos da una prenda de la gloria venidera. Siendo banquete pascual y renovación de la última Cena, lo razonable y aconsejable es participa'", comer y beber al Cuerpo y Sangre de Cristo, como El y la Iglesia desean ... 5.-EI Domingo día de gozo y descanso oliberación de trabajos Todos tenemos experiencia de ·10 que significan y cómo se cele– bran las principales fiestas familiares: boutizos, primeras comuniones, peticiones de mano, bodas ... Suelen ser días de alegría, de aseo y elegancia externa, de ban– quete familiar, de descanso y despreocupación de los trabajos or– dinarios. De un modo mejor y más elevado, por su alta significación es- piritual, debemos responsabilizarnos y revalorizar el Domingo, ya que: «es la fiesta primordial, que debe presentarse e inculcarse a los fieles -a su piedad- de modo que sea también día de alegría y de liberación del trabajo.»(Const. sobre Liturgia, n. 0 1O). Volvemos a percibir, en este tercer Mandamiento, ese tono, tan divino y humano, según el cual Dios nos facilita: paz, alegría, limpie– za, descanso, alimento del alma ... , todo lo que, es'piritual y humana- 94

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz