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5. La libertad de los hijos de Dios en el camino de la vida Gracias a los medios de comunicación social -prensa, radio y televisión-, nos damos cuenta de la extensión y profundi– dad humana, a escala individual y colectiva, del problema de la libertad . No obstante, no es signo de nuestro tiempo, sino tan anti– guo como lo es la existencia del hombre, dotado por su Creador de la facultad de obrar o de elegir una cosa con prefe– rencia a otras, que es la libertad. «La orientación del hombre hacia el bien sólo se logra con el uso de la libertad, la cual posee un valor que nuestros contemporáneos ensalzan con entusiasmo. Y con toda razón. Con frecuencia, sin embargo, la fo– mentan de forma depravada, como si fuese pura li– cencia para hacer cualquier cosa, con tal que deleite, aunque sea mala. La verdadera libertad es signo emi– nente de la imagen divina en el hombre. Dios ha querido dejar al hombre en manos de su propia decisión para que así busque espontáneamente a su Creador y, ad– hiriéndose libremente a éste, alcance la plena y bien– aventurada perfección». (Const. Iglesia yMundo,n. 0 17) . 1.-Libertad de los hijos de Dios La fe en Cristo, por la que recibimos su gracia y su Espíritu, al mismo tiempo que nos proporciona la vida y filiación divina, nos concede la verdadera libertad. Por eso dijo Jesús a los que habían creído en El: 48 «Si vosotros seguís admitiendo mi doctrina, sois verdadera– mente discípulos míos, y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres ... Os aseguro que quien se entregue al pecado, esclavo es del pecado ... Luego si el Hijo -os libera del pecado– os da la libertad, y seréis realmente libres.» (Jn 8, 31-36).