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de 7 ele abril de 1838 dió a los descendientes ele indígenas pa– ra proceder a la división ele sus Resguardos; y ningún Tri– bwwl ele la República claría entrada a procedimientos que tengan por objeto ejercitar el derecho que la presente Ley declara perecido, por causa de negligencia ele los agraciados". Por supuesto, los indios selvícolas, habitantes tradicio– nales de las más remotas regiones del país, no quedaban afce– lados por los problemas de tierras, como sí ocurría a las co– munidades cercanas a la población criolla o rodeada por és– ta. El selvícola era a[ectado ele otra manera: por la explota– ción despiaclacla de su persona, de sus servicios, en regiones donde ww protección oficial práctica se hacía casi imprac– ticable. Sucéclese cierta activiclacl legislativa en relación con el indio, pues vemos que la Ley de 1882 es derogada por la del 1ü de junio de 1881. Esta, a su vez, queda .mstituída por la del 25 de mayo de 1885. Luego, un acuerdo ele la Alta Corte Federal y de Casación, de fecha 10 de febrero de 189(J, declaró insubsistentes algunas parles de la Ley de 1885, por colidir con algunos artículos de la Constitución Nacional del 21 ele junio de 1803 y con el Código Civil en sus preceptos re– lativos a la propiedad y a la posesión. Y llegamos a la Ley del 8 de abril de 1904. Pero en verdad, sólo en la esfera legis– lativa hay cierta preocupaci<3n por el indio, y nada más. Corren los aiíos y nada se lograba en la práctica. Pero el 2 de junio del aiío 1915, el Congreso promulga la Ley de Misiones. Se había visto que sólo los misioneros religiosos se– rían capaces de someterse a las incomodidades y sufrir los sacrificios que implicaba ayudar al indio en su propio me– dio geográfico. Es ésta Ley la que, en la República, conduce por primera vez hacia una acción práctica ele las buenas in– tenciones ele los legisladores. En las Misiones delegaría el Go– bierno la obra indigenista que le correspondía realizar. El 23 ele octubre del wfo 1921, entra en vigor el Regla– mento ele la Ley de Misiones, que deroga el ele 1915. Se es– taba en los umbrales de la acción práctica. El 21 ele febrero -6-