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LA Cs1USA. INDIGEN.1 AMERICAN,1 EN LA.S CORTES DE CADIZ bían convertido en mercaderes usurarios mediante los ya dichos "repartimientos". Los señores Inca y Mendiola impugnaron el dictamen de la Comisión, pero lo defendieron los señores Guereña, Morales Duárez y el presidente. En esta ocasión dijo él que el Sr. Inca "dejó muy niño el Perú, y sólo puede ex– plicar su celo con noticias tradicionarias o históricas, según lo hará con otros países extraños. Mas habiendo venido yo en otra edad y en el año próximo ... ". El Sr. Morales Duárez se extendió en defender el dic– tamen de la Comisión, empezando por aclarar que se tra– taba sólo de los curas doctrineros o de indios, quienes re– cibían su cóngrua de las manos reales y no de los indios, para que la religión católica no se les hiciese odiosa o gra– vosa a estos neófitos. Y acto seguido hizo un gran elogio de estos curas doctrineros, en los siguientes términos: "Podré asegurar que no advierto otros ministros eclesiás– ticos más dignos y acreedores de esta práctica (ayuda) que los referidos doctrineros. No hallo expresión propia para sig– nificar los contrastes y amarguras de su destino.--Como la ley y la necesidad fijan las reducciones de indios en inmediación a sus campos, donde moran todo el día cultivando sus tierras o paciendo sus ganados, los asientos o doctrinas de los curas se hallan (por lo común) situados, bien en las cimas de los montes, bien en lo profundo de sus quebradas o dentro de pe– ñas rígidas en el centro mismo de las nieves, donde se alber– gan aquellos célebres carneros, productores de las exquisitas lanas: la alpaca y vicuña.-Bajo climas tan varios como te– rribles, en puntos donde nada ocurre grato a los sentidos, en– tre chozas inmundas y en una soledad espantosa, pues el indio con la aurora marcha al campo hasta la noche ( y la ley no permite radicación al español ni menos a las castas), allí es donde lo pasan esos dignos párrocos, sobrecargando, no sólo las atenciones pastorales, sino también las civiles. Incapaz el subdelegado o jefe del partido de asistir en estas lejanas es– tancias, el cura viene a ser su teniente, para entender en los contratos y diferencias de sus feligreses." - :'i7-