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BREVES NOTAS SOBRE LAS CORTES Y CUADRO DE HONOR Las Cortes, que se llamaron Generales y Extraordi– narias de Cádiz, se debieron a una convocatoria de la Junta Suprema Central y de la Regencia, que la sustituyó. Eran éstas una de las aspiraciones universales y una de las pro– mesas que suscitaban mayor entusiasmo. La Junta de Defensa de Sevilla había dicho que "se convocarán Cortes, se reformarán los abusos y se estable– cerán las leyes, que el tiempo y la experiencia dicten, para el público bien y felicidad, cosas que sabemos hacer los españoles, y que las hemos hecho con otros pueblos sin necesidad de que vengan los franceses a enseñárnoslas". Y rvienéndez y Pelayo escribe: "El deseo de una repre– sentación nacional (parecida o no a las antiguas Cortes, revolucionaria o conservadora, semejante al Parlamento inglés, o semejante a la Convención francesa, y ajustada en lo posible a los antiguos usos y libertades de Castilla y Aragón) era entonces universal y unánime" ("Historia de España", pág. 241. 1'Aadrid, 1934). Las sesiones comenzaron en la isla de León el 24 de septiembre de 181 O. La representación se hizo a base de un diputado por cada 50.000 habitantes; para las provin– cias de América y Asia se nombraron 30 suplentes en tanto que venían los representantes propietarios. Según nota-resumen de D. Rafael de Labra y Mar– tínez, por las Cortes de Cádiz desfilaron 303 diputados; de ellos, 63 fueron americanos. De los 37 presidentes, 10 - 11 --