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90 DÍA 18 A partir de aquel día, toda la vida de la Virgen va teñida del tinte morado de esta profecía, pudiéndose afirmar que no pasó una hora sin que la cruel espada hi– ciera algún estrago en su alma. Meditemos unos momentos en el primer dolor de la Virgen, y pidamos la gracia que deseemos conseguir. Paca mejor obtenerla , le dirigiremos las siguien– tes deprecaciones y Avemarías, como en la pág. 16. JACULATORIA Que tu dolor, ¡oh, Madre!, sea para mí una fuente de amor. • FLOR PARA ESTE DÍA Si puede ser, ofreceré a la Virgen el tor– mento de la sed, al menos durante algunas horas. EJEMPLO San Félix (fo Canfolido Bien merece mencionarse como modelo de fieles devotos de María, San Félix de Cantalicio, hermanito lego capuchino. Su vida es un conjunto de ternura de un