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158 NOVENA A LA INMACULADA CONCEPCIÓN Día 3 MEDITACIÓN : EN TAN GRACIOSA BELLEZA Completa este verso de hoy la significación del de ayer explicándonos por qué Dios ha encontrado su re– creo en María: por su «graciosa belleza». ¿Es bella la Virgen? Nosotros no podríamos imaginárnosla de otra manera. Bella no de cualquier modo, sino extraordina– ria, divina.mente bella. Aquello que se cuenta del Areo– pagita 1o entendemos muy bien y responde al ideal que tenemos de María. · Se dice que al convertirse Dionisio se fné a Efeso para visitar a la Virgen, y cuando estuvo ante su presencia quedó tan prendado de su gracia y belleza, que, según propio testimonio, si no hubiera sido porque la fe le decía que sólo hay un Dios, hubiera caí– do en tierra para adorarla como a diosa. Sí, María era bella en toda la extensión de la palabra. Aun físicamente, la Virgen era bella. Aquella vida divi– na intensa de sn interior, que la inundaba de dulce paz y encanto suave, irradiaba fuera, transformando sus ges– tos y sus facciones y haciéndolas hermosas. Pero la más apn:-ciabl8 era la belleza de dentro. A un alma la embellece la, gracia, que es una semejanza con Dios. Cuando más y mayor sea la gracia, tanta mayor semejanza divina y tanta mayor belleza. ¿Quién podrá, pues, figurarse la belleza de la Virgen, si su gracia aumentó de forma que excede a todo número y medida? Con esto, ya tenemos abierto el camino para obtener nosotros una belleza semejante: estimemos la gracia y veamos de aumentar su rico caudal. Meditemos brevemente y pidamos la gracia que desea– mos conseguir. Para mejor obtenerla le dirigiremos las siguientes de– precaciones y Avemarías (como el día primero). EJEMPLO: BE,ATA BEATRIZ DE SIL VA Era Beatriz descendiente de sangre real. Nacida en Por– tugal, entró en España acompañando a la Princesa Isa– bel cuando ésta vino a nuestra patria para contraer ma-

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