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CON FLORES A MARÍA 140 tas de María y, además de la alegría de esta vida, aseguraremos lo único que importa: nuestra eterna salvación. Meditemos en la necesidad de la media– ción de María, y pidamos la gracia que de– seemos consegmr. Para mejor obtenerla, le dirigiremos las sigwen– tes deprecaciones y Avemarías. como en la pág . 16. JACULATORIA Madre de Dios y Madre de los h(Hn bres, miradnos compasiva y salvadnos FLOR PARA ESTE DíA Prometo rezar todos los días alguna ora– ción o Avemaría en honor de la Virgen. EJEMPLO San Andrés Avelino Por difícil que sea nuestra si tuación, siempre nos comunicará extraordinario aliento el .ejemplo que nos da San Andrés Avelino. Quizá haya habido pocos espíritus tan tentados por el enemigo en su última hora.

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