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111. - LA PASIÓN DE LOS DESAFIOS De alguna manera hemos caído todos en la tentación de excluirnos. La nueva cultura tecnocientífica se burla de las disquisiciones razonables de la "vieja". Los seguidores incondicionales de la "nueva racionalidad tecnológi– ca" desprecian a quienes no se asocian a su talante y a quienes insisten en hablar de realidades que no se someten al alcance de esa tecnologización. Y estos tienden a sospechar de los beneficios de una ciencia que se va ofre– ciendo como palabra final. Por eso el Papa Benedicto nos recuerda que "/a verdad científica, en símisma participación en la Verdad Divina, puede ayudar a la filosofía y a la teología a comprender más plenamente a la persona humana y la revelación de Dios sobre el hombre". Son muchos los prejuicios que los cristianos y la Iglesia tenemos que dejar a un lado para acercarnos a la ciencia y a la tecnología. Por costumbre tende– mos a sospechar, a ver peligros, a juzgar de antemano. Han dicho algunos que si la religión sacral ha sido la etapa infantil de los creyentes, la secularista es la adolescencia que protesta contra aquella con– cepción de la vida y la historia. El diálogo entre la ciencia y la religión, entre la filosofía y la teología, han de constituir el camino necesario para el en– cuentro y la superación de esos extremismos. El mismo Galileo, que no dejó nunca su acendrada fe pese a colidir en al– gunos de sus descubrimientos con las autoridades de la Iglesia, escribía a Cristina de Lorena en estos términos: "Me parece que en las discusiones sobre problemas naturales, no se debería comenzar por la autoridad de pasajes de las Escrituras, sino por las sensatas experiencias y por las demostraciones ne– cesarias. Porque la Sagrada Escritura y la naturaleza proceden igualmente del Verbo divino, aquélla como dictado del Espíritu Santo, y ésta como la ejecutora perfectamente fiel a las órdenes de Dios". Juan Pablo II en la Christifideles Laici alude a las nuevas interpelaciones que se le hacen a la fe: "Países enteros y naciones, donde la religión y la.vida cris-