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V80UOliZ8r desde los signos de los tiempos Esos cristianos simples, que han participado en la lectura de la Biblia con pureza de corazón, que le han permitido al Espíritu hablarles, acaban siendo los militantes más sólidos de la Iglesia. Saben comprender incluso sus limi– taciones y la invitan a purificarse con extremada cortesía. Al entender que Jesús también les habla a ellos, se han sentido naturalmente inclinados a "seguirle" con todas las consecuencias. La Iglesia que les resultaba lejana y hasta cierto punto implacable, se ha convertido en el hogar que hay que barrer frecuentemente, pero que no por eso deja de ser acogedor. "Es una pena que la vida cristiana se haya relacio– nado frecuentemente más con la tristeza, el sufrimiento y la obediencia ciega que con el gozo, la libertad y la felicidad. Más con la renuncia que con la rela– ción personal, asegura F. Martínez. El objetivo principal de la vida cristiana es la bienaventuranza, la felicidad, la plena realización de las personas. Eso es lo que Dios quiere de los seguidores de Jesús y de toda persona humana". El Espíritu Santo hace de guía en el descubrimiento de la voluntad de Dios a través de la Persona y el Mensaje de su Hijo. Los demás "intermediarios" no pueden obstaculizar el camino. Deben facilitar el acceso. Mardones explica con sencillez las maravillas que el Espíritu puede hacer en todos. "Esta proxi– midad del Dios revelado en el cristianismo se hace aún mayor con la donación del Espíritu, en la que culmina la revelación de Jesucristo. La fe en el Hijo nos hace hijos, porque en el Hijo se nos da el Espíritu de Dios, derramado en nues– tros corazones, gracias al cual penetramos en el misterio de Jesús- podemos decir: ¡Jesucristo es el Señor!- e invocar a Dios como Padre. Por eso puede decir Pablo que el Espíritu de Dios mora en nosotros". Estaremos seguros de seguir a Jesús si tenemos fe y confianza en Dios Pa– dre- Madre en medio de los conflictos de la historia¡ si se palpa en nosotros la vocación de servicio; si vemos su imagen especialmente reflejada en los más pobres¡ si estamos con todo lo que convierta la vida en gozo y plenitud¡ si nos posicionamos al lado de la justicia sin discriminaciones, y si nos en– cuentran siempre dispuestos a comprender y perdonar.