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34 a aquel primitivo usso de su modo de vida tanto que por no dejarle, dieron a fray Pablo de Melissena (sic) (1) martirio: y conociendo los Religiossos que sus trabajos en mas de veinte años eran iiifructiferos, no obstante que havian embiado doze de ellos los mas perjudiciales a Curacas y el Governa- dor repartidolos en pueblos, llebandose muchos de los de Caracas y de las missiories a los llanos: Por el año de 674 dieron quenta al Gouernador Obispo Don fray Anttonio Gonzalez de Acuña para que viese que provi dencia hauian de dar a estas íiígas, y a la seguridad de los Religiossos no podian ni entrar a combertirlos, ni por si solos evitarlas: y entre las orde- nanzas que se hizieron por estos dos superiores para toda la prouinzia con Junta de ambos Cauildos y prelados de las Religiones, a que asisti Don Rodrigo Navarro Vissitador que era de aquellas Cajas (que despuP se confirmaron por zedula del Año de 676) Resoluio se fundase vna VII de españoles qué fuesse caueza u las Misiones con cuyos vecinos no sol se evitasen las fugas; sino que los Religiossos pudiesen entrar con algü na escolta para el resguardo de sus vidas y mayor augmento de las con be iones dandoseles algunos indios para que por tienipo de 10 años lo siruiesen tres dias en la semana con la calidad de que los heuian de yns truir en buenas y sanctas costumbres enseñarles y educarles hazerle, muy bueno y suabe tratamiento mirando por ellos como hijos y que fuess licito a los Religiosos entrar en las casas de los españoles a reconoze si los bejaban ó no ciiiydaban de ellos, y en este casso remober los depo- sitos de vnas partes a otras, y que la Justicia se hauia de poner por el Go uernador propon¡ enclole tres el Prefecto y acudiendo los vecinos a todo los llamamientos de estos Religiossos. Que con esta Prouidencia confirmada ya por Su Magestad se asegu raron aquellos Pueblos que hauian quedado y se hizieron cinco entrada sin que en ninguna de ellas se hiziesse nial alguno a los yndios ni los e pañoles sacasen las armas mas que para defender a este Religiosso qtí por hanerse adelantado a hablarles de Paz le vieron flechar tanto que 1 hubieran dejado muerto; si vn yndio amigo no hubiera puestose a reciu como reziuio la flecha y aunque de esta suerte se afianza parte de lo Pueblos en algunos de los que de nuebo se fundaron se vieron repetida sus fugas; Caussa porque se dize y resulta avere puesto a la Constift cion de la Sinodo y hauer venido fray Gabriel de Sant lucar a representa se hiziesen las entradas con la gente de Armas. Y tambien por ellas parece que sin embargo de que se les prohibio 1 entrada con senienjante escolta uuiendola repetido por si solos, se hel visto en grandes riesgos y peligros los Religiossos y fustradas las tedti ziones. (i) Plácido de Velicena.