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281 cia, y Don Joseph Venegas: y haviendo llegado al Rio de Apure, fueron en demanda (le los Indios Atapaymas, que el año antecedente no pudieron sostener los Padres Fray Bartholomá, y Fray Salvador de Cadiz; y ha- viendo caminado catorce dias a pie en su seguimiento, con imponderables trabajos, y hambres, de que resultó desertar los mas de los Soldados, ha- viendonos quedado solamente sesenta hombres, y estos muy quebranta- dos, y estropeados de las marchas, dimos con mas de mil Indios armados en guerra, de Nacion Atapaymas, Othomacos, y Guaranaos; y no pudien- do con la poca gente que teniamos, y nos havia quedado, sostenerlos, tra- tamos con buenas razones de persuadirlos a que se reduxessen, y se vi- niesen a pobldr a nuestras Missiones, y ofreciendoles varios partidos, y que los sustentarianios, y da riamos todo lo necesario, &c, a que de nin- gun modo ass4ntieron, y solo ofrecieron, que como se fuessen los Solda- dos, y quedasse con ellos algun Religioso, se reducirian, y que sus Pue- blos, con sus mugeres, e hijos, los tenian a corta distancia. Y haviendo conferido entre i los tres Religiosos lo que se deberia hacer, resolvieron, que uno de ellos, el que saliesse por suerte, fuesse el que se quedase con aquellos Indios, y los otros dos se holviessen con la escolta, y una Capi- tania de Indios Gentiles, de Nacion Atapaymas, que constaba de quarenta y ocho Indios, (que se havian dexado en el Real ya reducidos) en esta con- formidad se executó: y haviendole caido la suerte al Padre Fray Marcelino de San Vicente, se fue con todos aquellos Indios Gentiles a sus Pueblos, o Ranchos, llevando en su compañia solo dos Indios Interpretes; y Len- guarazes. La escolta se bolvió con los dos Religiosos a el Real, y antes de llegar estuvieron todos para perecer de necessidad. El sucesso del Padre Fray Marcelino fue, que le quisieron matar a él, y a sus dos Indios Inter- pretes; y despues de varios sucessos y conferencias, que entre sí tuvieron los Infieles, tomaron por por buen convenio el acuerdo de despacharlo, y darle libertad, con los dos Indios Interpretes, dandoles una inedia Canoi- Ita, para que se bolviessen a sus tierras, y a pocos dias llegó dicho Padre a incorporarse con nuestra escolta, perdido todo el trabajo, y este fue en suma el fruto de esta tan costosa, y desgraciada jornada. 72. Haviendo llegado todos al Real (que se puso en donde se parte al Rio de Apure en dos brazos) los Soldados, unos que se havian desertado, y otros que se havian amotinado, no quisieron proseguir la jornada a el Orinoco; y por cumplir con los ordenes del Prefecto, se destacaron los Padres Fray Dartholonid, y Fray Salvador con solos treinta hombres, en- tre Españoles, Mulatos, o Indios, que les quisieron seguir; y embarcados en dos Canoas, tornaron la derrota al orinoco por el brazo de Apure, que llaman el Guarico, y va a dar al Orinoco por los Cerros, que llaman de Cabruta. En el Orinoco estuvieron con varias Naciones de Indios, trata- ron con ellos de su reduccion, y todos los mas(a excepcion de los Caribes)

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