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91 dia ponderenlo los mismos que lo experimentaron; que la relacion por mas que se dilate, siempre queda corta. Luego se_dispuso _vn_ religioso muy gustoso para irse con los indios, en ¿i'jañia de los quales hizo su vlage, y en distancia de dos dias de camino, desde Cumanacoa, a las faldas de el cerro de el Guacharo se dio principio a la rnission; as¡ que llego el religioso al dicho sitio, luego se fueron juntando muchos indios de diversas partes, vnos y otros liberales traian de los mantenimientos con que se alIaban,empezaron luego a fabri- car casa para el Padre,, y como lo hacian con gusto, condujeron presto con ella=A este tiempo ya quedaban _ajustadas _las _paces, _entre los espa- ñoles, y mucha parte de los indios de esta Provincia, y as _mismo entre los caribes de las islas debarlobento, era para alabar a Dios ver quan fervo- rosos andaban _los barbaros,_en acudir apoblarse junto al Padre hacien- do con_grandissima brebedad sus cassillas, y labranzas,costabales a los pobres muchotrabaio,porque corno asta entonces habian estado tan de - rramacíos_por los montes, y_en sus Ttos antiguos tenian lo que_habian cíe comer, era fuerza irlo a buscar todo, vnos a distincia de vndiaotros y otros a menos, de donde venian cargados como bestias, por ca- minos tales que la primera vez que se ven, parece ser imposible 'andarlos gentes, aunque a ellos todo se les hacia facil, con el gusto-que los anda- ban, en brehe se hizo vna Poblacion de indios arto numerosa y la pusie- ron debajo la protecioN cíe la madre de dios con titulo de, Sta. Mriade los Angeles, aqui se recogieron los missionarios, esperando oportunidad para dilatarse mas. CAPITULO X. QUERATA DM LOS NUEVOS AVANCES DE LOS MISIONEROS Y DEL TEJER Y DES- TEJER DE LOS GOBIERNOS. Y como el fuego de la caridad no les ciaba quietar, luego trataron ir buscando mas almas para dios, vno de los religiosos acompañado de los indios de la Poblacionnueba de Sta. Maria de los Angeles, se fue por esas serrunis,_y montañas, paso por diversas naciones, llego ata los Farau- tes, gente que tiene sus habitaciones sobre el agua, paso a los Caribes de el Rio_c3uarapiche, y padecio de trabajos, lo que no es facil de ponderar, encontro en esta jornada a vn hombre blanco, olandes, o, ingles, este tal estaba muy bien admitido entre estos naturales, por haberles persuadido, que tenia vn remedio con 'el qua¡ remozaba la gente, y de viejos los vol- via mozos, era el remedio ciertos polbos, y vnguentos con los quales les