BCCCAP00000000000000000000509

79 esta vivo el pobre indio, hecha aquella diligencia, sale el tercero caribe, y con otro espadin le corta los brazos, piernas, ecta. y lo va haciendo pe- dazos; y otros se lo ponen luego asar y cl este modo ban haciendo a los demas. Quando por la prisa, o, porque los enemigos les resisten en sus gue- rras, no pueden coger los cuerpos de los muertos enteros, les cortan a lo menos vil brazo, o, vna pierna, y esso llehan para comer, A las muge- res aunque las maten no las quieren comer, en cierta ocasion, un religio- Capuchino, andaba buscando por estos montes almas que traer a su po- blacion, llego a casa de ciertos caribes y assi que bieron, a un indio que acompañaba al religioso, trataron de comerselo; y el desdichado indio co- mo les entendia a los caribes la lengua, afligido acudio al Padre, refiriole lo que los barbaros trataban; consoló al iridio, y dijole que no temiera crido en su compañia que antes lo comerian a el que no le hizieran el me- nor daño, y les empezo ablar ¿1 Padre a los caribes de modo, que ame- dr'entados de sus palabras, y principalmente de Dios, todos desampara- ron su casa, y en ella se dejaron al Padre con su afligido indio. Antes que _lo¿_religiosos _hubie'ran entrado a reconocer la tierra para primero' v- plorar los aninios del jentio; enibiaron tres, o, quatro indios que entendian y abiaban la lengua cariba, para ver si por su medio se podia aliar alguna entrada, llegaron los dichos indios a casa de los caribes, dieron su bajada de parte de los Padres, oieronla y Ii la nochecer, vieron que los caribes de vno en vno se veuian, a donde estaban los indios y los palpa- ban, los brazos, y piernas conio probando si estaban gordos; y vno.de los caribes dijo, es posible que tengamos aqui nuestras comidas, y que no las conlamos; apenas oieron esto los desdichados indios quando que- daron qual se puede imaginar; quiso Dios que los caribes se pusieron a dormir, y los indios, aquella misma noche como pudieron se huieron, por escapar la vida que tuvieron por cierto perder. on tan inumanos estos barbaros caribes, que en cierta ocasion me refirmo un español, con arta laslima y compasion, que avia encontrado en un camino cerca de nuestras Misiones, a vnos caribes, los quaies lleva- ban a dos niños asta de edad de cinco años, donosissimnos, y muy gor- ditos; pregunto a los caribes a donde iban; y ellos respondieron iban a vria borrachera, o, bebida, que se habla de tener en casa de otro caribe, y llebabari aquello dos niños para alli comerselos, quando ojo el corn- pasibo hombre tal cosa, se le estremecio todo el cuer'po, y dijoles, que se los vendiesen, y no los matasen. Lleaha dos caballos consigo, y en pa- go de los niños se los ofrecio, ellos no quisieron darlos. ofrecioles guau- to llebaha consigo, asta la ropa con que se vestia, y ni por eso quisieron darlos, antes fueron a su borrachera, o, bebida, y alli los mataron, y co- mieron, quedo el hombre español afligidissimo de ver tan orrenda cruel-