BCCCAP00000000000000000000508

MISION DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 415 con V.E. sobre esta provisión, se realizó mediante la presentación que se sirvió hacerme en el sobredicho Br. Don Andrés de los Ríos. Pon lo respectivo a la segunda cosa de las dos propuestas, que lo es: los medios de realizar la devolución de los expresados curatos a los Reverendos Padres Capuchinos, sin perjuicio de los clérigos pro- vistos, pues ellos han obtenido canónicamente aquellos beneficios y, a excepción del Dr. Don Ramón de la Peña, que se ha fugado y tengo dadas providencias para hacerlo venir a esta capital, si pareciere, para juzgarlo, los demás no creo que tengan ninguno de los motivos canónicos para poder ser depuestos legalmente al oficio y mucho me- nos a beneficio, y que, aun en caso de haberlo, no pueden ser remo- vidos sin formarles causa y oírlos conforme a derecho, como está dis- puesto por la real cédula circular de 1? de agosto de 1795. Por lo cual, conciliando los extremos de la indicada necesidad insinuada en el enunciado oficio de V. E. y de la de dar beneficios equivalen- tes a los sobredichos curas, me parecía que, de los curatos que hay actualmente vacantes, se les acomode en calidad de interinos mien- tras se les proporcione hacer oposición a otros: Al Br. Don Andrés de los Ríos, en el del pueblo de Cagua; al Pbro. Don José Tomás Fernández, en el de Barbacoas; al Pbro. Don Manuel Antonio Gon- zález, en el de la Corteza; al Pbro. Don José Claudio García, en el de Nuestra Señora del Carmen de Cura; al Pbro. Don Gabriel An- tonio Godoy, en el de Ipire, y al Presbítero Don Juan Antonio Ru- bira, en el de Guayabal. Y en efecto, si V. E. no tiene embarazo por su parte, desde luego expediré las congruentes órdenes para realizar este proyecto. Dios guarde a V.E. mucho años. Caracas, diez y ocho de febrero de 1813.— Excmo. Señor; Narciso, Arzobispo de Cara- cas.— Excmo. Señor Capitán General de estas provincias y Jefe Po- lítico de ellas. Oficio.— M.R.P. Prefecto: El señor Capitán general, Jefe Político de estas provincias de Venezuela y Vicepatrono regio en ellas, se sirvió insinuarme, en oficio de 12 del próximo febrero, tener por muy conveniente a la tranquilidad pública que los Reverendos Padres Capuchinos volviesen a encargarse de las misiones secularizadas a la otra banda al sur del río Apure en la provincia de Barinas, en la parte que allí pertenece a esta archidiócesis de Caracas. Y en esta atención y a lo que consecuentemente he tratado y conferenciado con Su Se- ñoría por escrito y de palabra, con que se ha allanado la dificultad

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz