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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 315 cédula de 16 de mayo de este año con el decreto de V. S., en que se me previene presente ante el tribunal una razón que abrace los pun- tos comprendidos en ella, relativos a informar el estado actual de las misiones de mi cargo. En obsequio de este precepto debo hacer presente a V. S. que las referidas misiones tuvieron principio y se establecieron aquí el año de 1658, desde cuyo tiempo hasta fines de mayo último han servido el ministerio de ellas 146 religiosos capuchinos de la provincia de Andalucía, que se remitieron sucesivamente para el efecto desde los reinos de España. De éstos han muerto en las misiones 88 y por cumplidos se han regresado a España 41, resultando existentes en la actualidad el nú- mero de 17 y entre elos cuatro inhábiles, que, por su avanzada edad, enfermedades habituales y largo trabajo en el ministerio apostólico, no pueden dedicarse a las penosas fatigas a que fueron destinados. Con representación de esta falta de operarios y del aumento de las reducciones y poblaciones que ascienden al número de 29, sin contar otras varias congregaciones de gentiles a que atiende el P. Pre- fecto, se sirvió S.M., por su real resolución de 9 de agosto del año pasado de 1785, conceder, a más de los referidos, el número de 24 religiosos de la misma provincia de Andalucía, de los cuales arri- baron al puerto de La Guaira 13 en 25 de mayo de este año y se hallan hoy destinados al servido de las mismas misiones. Según el estado de ellas en la actualidad y atendiendo a que aún con el auxilio de los 13 religiosos venidos en este presente año, hay algunos que sirven tres pueblos distantes uno de otro y regular- mente dos; después que sean llegados los 11 que faltan para el cum- plimiento de los 24 últimamente concedidos, contemplo suficientes para auxiliar la falta de los que fueren inutilizándose y el aumento de las poblaciones, el aumento de uno o dos en cada año, habida consideración a los eclesiásticos seculares que puedan destinarse al servicio de algunos pueblos. Para que con más claridad venga V. S. en conocimiento de todo, hago solemne presentación del adjunto estado general que representa el actual de las misiones desde su establecimiento y comprende los particulares expuestos a que termina la real orden; en cuya virtud suplico a V. S. se sirva haber por cumplido el tenor del auto que