BCCCAP00000000000000000000507

MS5ION DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 73 ante V.S.I. parezco y digo: que en dichas misiones se fundaron dos Villas de españoles, una nombrada San Carlos de Austria y la otra Nues- tra Señora del Pilar de Zaragoza de Araure, con el motivo de que sir- viesen sus vecinos y moradores de defensa y resguardo a los pueblos Comarcanos de los indios de dichas misiones, y para impedir y repri- mir las fugas que continuamente intentan ejecutar dichos indios, y asi- mismo para que COfl facilidad se reclutase gente que acompañase y escol- tase a los religiosos en las entradas que hiciesen en los montes a reducir indios gentiles, por cuyas razones aprobó S.M., que Dios guarde, la fun- dación de dichas villas y se pusieron al cargo de los misioneros para que, como sus párrocos y curas de almas, les diesen el pasto espiritual, como hasta lo presente se han mantenido, siendo párrocos de dichas villas los dichos misioneros, en conformidad de la real voluntad, y aunque al pre- sente subsisten las mismas causas que ocurrieron para la fundación de dichas villas de españoles y que por dichos misioneros se les adminis- trase el pasto espiritual, como sus verdaderos párrocos proveyéndose asimismo de cura doctrinero el pueblo de San Miguel de Acarigua, que era el cargo de cura secular y al presente lo es un Padre Capuchino, y considerando los inconvenientes que se siguen al principal instituto de dichas misiones, que es el sacar las almas del gentilismo y reducirlas a nuestra santa fe católica, que tanto ha deseado y desea el fervoroso celo de nuestro rey y señor, que en cierto modo se imposibilita, estando ocupados diferentes religiosos en el ejercicio de curas de dichas dos villas y pueblo de San Miguel de Acarigua, siendo corto el número de religiosos que hay en dichas misiones y el estar unos imposibilitados por sus enfermedades habituales y otros asistiendo en los pueblos de ditas misiones, de manera que o se ha de omitir el hacer entradas para sacar y reducir las almas de los indios gentiles, o se ha de faltar a la asistencia de la doctrina de los pueblos fundados, y, siendo pre- ciso atender así a la conversión de dichos indios, sacándolos de los montes como a la conservación de los reducidos y recién convertidos, se confirió, trató y acordó por mí y los demás Padres religiosos capuchi- nos de dicha misión, para subvenir al remedio de lo más necesario, que es la conversión y conservación de los indios, el que se hiciese ante V.I. dejación de los curatos de dichas dos villas y del pueblo de San Miguel de Acarigua, para que se proveyesen conforme a lo dispuesto por S.M. > y que los religiosos misioneros, que hasta el presente obtie- nen dichos curatos, sirvan al aumento de la conversión de las almas y