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MISXON DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 401 para el mejor gobierno de V. S. la expresada relación que pide, la dé yo individual en la forma necesaria por haber estado entendiendo, por orden del R.P. Comisario general y de sus antecesores, algunos años en las dependencias y negocios de las misiones, cuya relación jurada formo y hago en la manera siguiente. Primeramente, por lo respectivo al estado de las misiones y su modo de gobierno, reducción de indios, pueblos que se han fundado desde el principio de ellas, los religiosos que las han cultivado, los indios que se han sacado y reducido del gentilismo, las naciones que quedan por reducir y los pueblos que hay existentes a nuestro cargo hasta el día veinte de agosto del año pasado de setecientos y cuarenta y cinco, que se formó el plan y estado que habían tenido y tenían has- ta el citado día, mes y año estas misiones, constarán a V. S. por el cuaderno que presentó impreso, deducido y sacado de autos auténticos y cédulas reales de S.M. , segin y conforme en él se citan. Desde dicho día veinte de agosto de cuarenta y cinco hasta el presente de agosto de cuarenta y ocho han fallecido y muerto los re- ligiosos misioneros siguientes: Primeramente, Fray Martín de Corella, que administraba el pue- blo de misión de San Javier y vino de España a esta provincia el año de setecientos y treinta y dos; murió a fines de agosto del año próximo pasado de cuarenta y siete. Iten, por el mes de octubre de dicho año murió Fray Antonio de Oporto, que vino a estas misiones el año de setecientos y veinte y tres, como de sesenta años. Iten, el día ocho de diciembre del mismo año próximo pasado mi-6 en el pueblo de San Javier, de edad de noventa y cuatro años, el R. P. Fray Marcelino de San Vicente, que vino a estas misiones el año de mil seiscientos y noventa y nueve. Iten, el día veinte y ocho de enero del presente año murió en el convento de San Francisco de la ciudad de Cumaná el Padre Fray Tomás de Pons, de edad de setenta y cinco años, como consta de la certificación que presento dada por el Guardián y discretos de dicho convento. Iten, el padre Fray Bernardo de Castellón de la Plana, que, habien- do llegado a estas misiones de las de Maracaibo para restituirse a Espa- íia sin haber cumplido el tiempo prefijo por leyes de estos reinos y haberse venido sin licencia precisa del señor gobernador de sus misio-

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