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308 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA coger, como consta de autos, no se pudo conseguir, excepto unos po- cos, que se llevaron a la misión del Carmen. 87.—El siguiente año de 1726 hicieron los Padres Fray Barto- lomé de San Miguel y Fray Salvador de Cádiz otra entrada, con mu- chos soldados que llevaron a esta expedición, comandados por Don Juan Cevallos, alcalde ordinario de la ciudad de San Sebastián, y des- pués de tres meses largos que gastaron en esta empresa, en varias co- rrerías que hicieron, lograron el reducir doscientos y sesenta y ocho indios gentiles de nación otomacos, amaibos, guarariaos y guamos, con los que se fundó la nueva misión y pueblo de San Rafael de Ono- to, como consta de autos, y dentro de dos meses hicieron fuga todos los expresados indios, y despachando en su seguimiento una escolta los alcaldes de la villa de San Carlos, se aprehendieron los más y se restituyeron a su pueblo (consta de las diligencias judiciales). 88.—Por el mismo tiempo se pasó en Cojede una capitanía de cuarenta y seis indios guamos con su capitán llamado el Mostrenco, y, habiendo escasez de mantenimientos para sustentarlos, pidió este capitán licencia al Padre Fray Buenaventura de Vélez, que adminis- traba aquel pueblo, para ir a buscar por el río frutas y cacerías; y, habiendo vuelto fielmente a los ocho días la primera vez, a la segunda que se le dio la licencia, abusando de ella y juntando toda su gente, no volvió más, llevándose también consigo otras familias de los indios ya reducidos y cristianos; y lo que fue más sensible para todos noso- tros, muchos muchachos que hurtaron a sus propios padres cristianos. 89.—En este mismo año salieron del Orinoco para poblarse en las misiones de Calabozo dos capitanías de indios gentiles de na- ción arucaimas y mapoyes en número de ciento y veinte indios, y, después de mantenidos, vestidos y aviados de herramientas a costa de los religiosos, dentro de pocos meses se huyeron. 90.—Por el mes de noviembre de este mismo año, salieron a otra jornada los Padres Fray Miguel de Olivares y Fray Francisco de Campillos con sesenta hombres que llevaron de escolta, comandados por el maestre de campo de la ciudad de Guanare Don Miguel García; y, después de muchos gastos que se hicieron en la fábrica de canoas, víveres, municiones, etc., y después de tres meses que gastaron en esta expedición, por los muchos contratiempos que sobrevinieron a causa del riguroso invierno, sólo redujeron diez y siete indios que poblaron en la misión.