BCCCAP00000000000000000000507

176 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA .tidos daños que están experimentando los indios gentiles de diferen- tes naciones que habitan los interiores llanos de esta provincia por los indios caribes del río del Orinoco, los cuales, teniendo hecho asiento con los holandeses que habitan las colonias de Surinama, Verbis y Esquibo, que están situadas en los dominios de V. M., como 40 o cincuenta leguas más a barlovento de las bocas del Orinoco, se intro- ducen por este río dichos holandeses y, sin poderlo embarazar el cas- tillo de la Guayana, por la mucha latitud que por aquella parte tiene el río, pasan a comerciar con los caribes, a quienes, administrándoles diferentes armas de fuego y adiestrándolos en ellas, se introducen a hacer guerra a las demás naciones de indios pacíficos, así del Orinoco como de los ríos de la Meta y Casanare, jurisdicción del Nuevo Reino de Santa Fe, y también a las que habitan en los ríos de Apure, Por- tuguesa y otros de esta provincia de Caracas, haciendo lastimosísimos estragos en dichos indios, quitando la vida con crueldad a los grandes, asando y comiéndose inhumanamente a los que les parece y llevándo- se prisioneros a los muchachos y mujeres de menor edad, a los cuales venden los referidos caribes por esclavos a los holandeses, que es el asiento que con dios tienen, herrándolos éstos por tales esclavos y llevándoselos a sus colonias. Y en recompensa o paga les suministran las armas de fuego referidas, con que cada día se van más y más adiestrando en el manejo de ellas, como parecerá a V.M. por los instrumentos que a esta acompaño. Esta misma insinuación, con diferentes instrumentos jurídicos que los comprobaba, hice a V. M. con Fray Salvador de Cádiz el año pasado de 1722, hallándonos en esos reinos de procuradores de estas misiones, por orden de V.M. , por medio de Don José Patif'io, Presidente de la Casa de la Contratación a las Indias. Como testigos prácticos y oculares de todo lo que habíamos especulado en el Orino- co, en una larga peregrinación que por él hicimos de orden del Pre- fecto que por entonces era, acompañando a dicho informe diferen- tes papeles que comprobaban la verdad de lo sucedido, y proponiendo a V.M. los medios que parecían más oportunos para poner el reparo conveniente a las malas consecuencias que resultan y mayores que resultarán de este trato y comercio que mutuamente tienen entre sí los holandeses y caribes en deservicio grande de Dios y en desdoro de y. M., quien, habiendo recibido bajo su real amparo y protección a estos indios que habitan en vuestros dominios, no parece, señor,