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94 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA noco algunos caciques o capitanes de aquellas naciones, que dejamos informado a V.M. el mes de abril del año pasado de 722, que se hallaban deseosos de recibir la doctrina evangélica, los cuales, venden, do la gran distancia y muchas dificultades que se ofrecían desde el Orinoco hasta la dudad de Caracas, vinieron a ella a rendir la obedien- cia de V. M. y a pedir a vuestro gobernador, Don Diego Portales y Meneses, les diese providencia de ministros para que los doctrinasen e instruyesen en la fe, y vuestro gobernador, después de haberlos aca- riciado y hecho con ellos cuantas demostraciones de afabilidad le fue- ron posibles, distribuyéndoles con liberal mano algunos dones, les ofre- ció el que les enviaría ministros para que los doctrinasen, pero que ellos hablasen a los demás para que saliesen a poblarse, ofreciéndoles a todos e1 mismo trato y liberalidad que había usado con ellos; con que se volvieron muy gustosos y tan fervorosos que dentro de tres meses, con poca diferencia, sacaron consigo gran cantidad de indios de diferentes naciones al sitio que llaman de Calabozo, en lo interior de los llanos de esta provincia, sitio muy cómodo para su conserva- ción, y distante cuatro días del camino del Orinoco, y otros cuatro, con poca diferencia, de la ciudad de San Sebastián. Y, habiéndonos pedido vuestro gobernador que, en cumplimien- to de nuestra obligación e instituto, pasáramos a catequizar e instruir en la fe a dichos indios, fuimos luego a ellos dándonos vuestro gober- nador, con el celo tan grande que le asiste del servicio de V.M., a sus propias expensas todo el auxilio favor y providencia que necesitá- bamos para tal empresa; y, llegados que fuimos al sobredicho sitio Ca- labozo, hallamos en él gran cantidad de indios que de diferentes nacio- nes habían salido del río de Orinoco, movidos de las noticias que los otros habían dado de los agasajos y expresiones que con ellos había hecho vuestro gobernador, y luego trazamos el fundar allí dos pobla- ciones en que actualmente quedan entendiendo dichos indios: la una población con el título de la Santísima Trinidad, y la otra con el de Nuestra Señora de los Angeles, y se han ofrecido dichos indios a traer otros diez pueblos del Orinoco, con que se podrán adelantar mucho estas misiones, y especialmente se facilita la reducción de los demás gentiles del Orinoco, de donde resultarán las conveniencias que tene- mos propuestas a Vuestra Majestad en el informe que tenemos hecho en esos reinos el año pasado. Y como quiera, señor, que la reducción y conversión de estos indios, y los buenos progresos que se esperan, • -•

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