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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 55 hecho el 25 de junio de 1668,32 debió tomar decisiones sobre una me- jor distribución de personal, y a tal efecto ordenó que al menos tres religiosos de la provincia de Castilla, que en Cumaná venían prestando sus servicios, pasasen a la de los Llanos. Fueron los PP. José de Nájera y Agustín de Villabáñez y el Hno. Fr. Cipriano de Madrid, llegados de la misión africana de Arda a la de Cumaná en 1661. Por el mismo P. Nájera sabemos que precisamente fue debido a esa ne- cesidad de personal y asimismo para "interpretar y reducir a forma inteligible su lengua (de los indios de los Llanos) como lo había hecho la de los indios chaimas o cores en la provincia de Cumaná y la de los negros de Arda".` Por el mismo P. Nájera sabemos que estuvo enfermo en Caracas de paso para los Llanos.` Además, que allí estu- vo curándose con el P. Orencio de Bujaraloz por septiembre de 1669, y que un año después ambos se encontraban en Madrid.` Por lo tanto, es de suponer que también el P. Agustín de Villabáñez y Fr. Cipriano (le Madrid pasasen por la misma razón a los Llanos y en ese tiempo, tanto más cuanto sabemos que el P. Villabáñez se encontraba en los Llanos en 1670. Nos consta a su vez que el P. Villabáñez seguía encargado de los indios del Cerrito de Santa Rosa en octubre de 1680, en febrero de 1681 y asimismo en julio de 1682Y El obispo González de Acuña tenía grande aprecio de él por el fervoroso celo que reanimaba su corazón.38 De él hace grandes elo- 32. Cfr. mi obra: Misión de los Capuchinos en Cumaná, 1, 109 s. 33. Ibid. Consta por una certificación del cura de Cumaná y síndico de los misioneros capuchinos de allí, D. Mateo de Luna y Lazcano, Cumaná, 16 diciembre 1661, que habían sido vendidos allí 8 esclavos que los citados religiosos habían llevado de Arda (AGI, Santo Domingo, 221, n. 109). 34. JOSE DE NAJERA, O.F.M. Cap., Espejo místico en que el hombre in- terior se mira prácticamente ilustrado para los conocimientos de Dios y el ejercicio de las virtudes, Madrid 1672, f. 9v. 10. Esta obra, según él mismo dice, fue compuesta durante su estancia en Caracas, estando enfermo. 35. Ibid. 36. Memorial suscrito por los PP. Orencio de Bujaraloz y José de Nájera, Madrid, 17 noviembre 1670 (AGI, Santo Domingo, 801). 37. Carta del obispo González de Acuña, Maracaibo, 8 octubre 1680, al P. Prefecto, y del P. Diego de Marchena al obispo, San Francisco de Tirgua, 11 febrero 1681 (AGI, Santo Domingo, 221, ramo IV). También autos hechos por el P. Marchena en orden a los indios del Cerrito, Barquisimeto, julio 1682 (Ibid., Santo Domingo, 197 A). 38. Cfr. la certificación y facultades dadas por González de Acuña, 22 diciembre 1673, ya citadas.
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