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24 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA • I i (San Antonio de Choro) cuatro de mis compañeros, y porque tengo entendido que la venida de los Capuchinos a estas provincias no sólo ha sido para tratar de la conversión de los indios sino también de los españoles, quiero referir a vuestra merced parte de lo mucho que la divina Majestad ha obrado en estas provincias mediante la predicación que los seis Capuchinos han hecho en las ciudades. El P. Fr. José de Carabantes, con su compañero el P. Fr. Francisco de Tauste, han pre- dicado en las más ciudades de esta provincia de Caracas, con tanto fruto de los españoles, cual jamás se vio en estas provincias; el P. Fr. Agustín de Frías, en la de Cumaná, Barcelona y la Margarita; el P. Fr. Lorenzo de Belmonte y yo, por otras partes, con tanto fruto por la nueva doctrina, que pasan de diez mil las confesiones genera- les las que se han hecho en menos de un año; la reformación de las vidas es grande. En suma, sólo yo, con ser inferior a mis compañeros con sólo el viaje de los llanos, en cortijos, encomiendas, vaquerías y hatos, en las cuales vivían blancos, tengo hechas pasadas de trescien- tas confesiones generales sin otras muchísimas ordinarias". Prosigue refiriendo los éxitos de la predicación en pueblos y ciudades de espa- ñoles, de tal modo que religiosos de otras Ordenes le habían dicho constituía pecado mortal el que dichos seis Capuchinos se dedicasen a la reducción de los indios en vez de predicar a los españoles. Por todo ello el P. Magallón se atrevió a pedir a Leguía solicitase del Con- sejo de Indias le autorizase para poder enviar a sus compañeros de ciudad en ciudad predicando y oyendo confesiones.` Esa carta fue una auténtica bomba que pudo tener muy fatales consecuencias para las dos misiones, de los Llanos y Cumaná. Cuando se hacían diligencias para el envío de más religiosos, se recibió ese es- crito del P. Magallón en octubre de 1659. Comenzaron las consultas del Consejo al rey, peticiones de informes a los respectivos goberna- dores de aquellas provincias, nuevas consultas, y orden terminante de suspenderlo todo. En tal momento ocurre la providencial llegada del P. José de Carabantes a Cádiz y luego a Madrid; su valiosa y detalla- da relación de los éxitos conseguidos tanto en Cumaná como en los Llanos, en la reducción de 105 indios y fundación de poblaciones, só- lo sirvieron para aminorar los efectos de la tempestad.` Continúan las 16. Carta del P. Magallón al secretario del Consejo de Indias, D. Gregorio Leguía, Caracas, 2 diciembre 1658 (AGI, Santo Domingo, 641). 17. A pesar de esos informes tan fidedignos del P. Carabantes sobre los éxitos logrados por los Capuchinos, tanto en Cumaná como en los Llanos,