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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 515 hato, que hacen cuidar los religiosos, y de él se socorren las misiones así de carne para el sustento de los misionarios como para el de los indios enfermos y necesitados, a quienes continuamente se les asiste con la carne, y del sebo se hacen velas para alumbrarse los religiosos, y la manteca sirve para las lámparas de la iglesia, de suerte que, con las limosnas que los Padres recogen de los fieles, se sustentan así ya los indios y pueden, mediante ellas y la industria y economía de dichos misionarios, mantenerse la dicha misión, pues el trabajo de los indios hasta ahora no se ha podido hacer ni tener una mínima parte ni se probará que, de lo que ellos pueden haber fructificado, se haya vendido un sólo grano de maíz ni otra cosa para comprar alguna de las que precisamente se necesitan en aquellos desiertos, donde, para poder mantener la vida natural, se necesita de que las reses que se juntan de limosna, se guarden en un hato sin que se extrañe que le tengan, y el maíz para el sustento, de que se guarde en la troje, y a este respecto las demás cosas que se adquieren, pues, si no hubiera esta orden y prevención, perecieran miserablemente, pues allí no hay quien dé limosna todos los días ni a quien pedirla, ni es fácil reducir la vivienda en lo natural a los términos de lo que por acá pasa. Con lo que en esta parte se puede haber extrañado hacia el modo de gobierno que los Capuchinos tienen en la misión para po- derse mantener en ella, y los informes que sobre ello se han hecho, han sido en falta de conocimiento práctico de estas cosas y sin expe- riencia de ellas, sí sólo por desacreditar a los misionarios y emba- razarles el tiempo para que precisamente se vean obligados a dar satisfacción por su mismo crédito. Esta se hallará más comprobada en las informaciones y demás instrumentos que se presentan con este memorial, donde expresamente se contiene cuanto hace a este punto desde el número 145 a 152 de los autos a que se remite. En cuanto a la conferencia que V.M. se sirve mandar tuviesen obispo, gobernador y Prefecto de la misión sobre que se formasen cajas de comunidad, se hizo, y, en vista de que los indios de la dicha misión no tienen ningunos bienes propios, ni su trabajo hasta hoy es de consideración ni fruto de importancia, les pareció por ahora cosa impracticable hasta que, más hechos al trabajo, en lo de adelante se puede introducir, como más largamente parece de los autos que se