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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 495 donde hoy se hallan, se discurran y apliquen todos los medios que pudieren conducir a su mayor docilidad, quietud y sujeción y al castigo de los que fueren delincuentes, dándome cuenta inmediata de lo que en dicha junta se determinare, ejecutare y pareciere. De todo lo cual me ha parecido preveniros para que lo tengáis entendido y por vuestra parte concurráis y cooperéis a este fin con el celo y amor que os asiste del mayor servicio de Dios y mío. Con este motivo os apruebo lo que obrasteis y dispusisteis para la población de los indios tomusas que salieron a pedir el bautismo cuando ibais a la visita, y os encargo aten- dáis mucho a su conservación y aumento y a la reducción de los demás, y me avisaréis en la primera ocasión del recibo de este despacho. Fecha en Madrid, a seis de abril de mil seiscientos noventa y uno.— Yo el Rey.— Por mandado del rey nuestro señor, D. Juan de Larrea. 99 Memorial del P. Ildefonso de Zaragoza al rey y Consejo de Indias, en el que hace la historia de la misión de los Llanos, aduciendo muchos datos y pormenores; examina también el contenido de ocho cédulas dadas en 1689 y relativas a dicha misión y formula trece peticiones a favor de la misma.— (1692).— Original (AGI, Santo Domingo, 222). Se hace notar que este memorial fue publicado por el P. FROILAN DE RIONE- GRO, O.F.M. Cap., en: Relaciones de las misiones de los PP. Capuchinos, II, Se- villa, 1918, pp. 1-27. Señor: Fray Ildefonso de Zaragoza, religioso capuchino, predicador y misionero apostólico de las misiones de la provincia de Caracas, dice: Que habiendo llegado las dichas misiones a términos de acabarse y des- poblarse, perdiéndose todo lo trabajado en servicio de Dios nuestro Señor y de V.M. y bien de aquellas almas, por las causas que dirá, y teniendo mediante ellas el desconsuelo que se deja considerar, todos los Padres misionarios que se hallan ocupados en la dicha misión, viendo que a más andar se experimenta la total ruina de ella, faltán- doles en los ministros de V.M. que tiene en aquella provincia y en el obispo de ella la protección y amparo que debieran esperar los misio-