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CAPITULO VIII Exitos logrados en quince años 1.—Entrega de cinco pueblos al obispo. 2.—Más entradas a los indios: nuevas fundaciones. 3 .—Otras villas de españoles esta- blecidas. 4.—Reducción singular: los seguidores de Andresote. 5.— Altas y bajas en el personal. 6.—Varios sucesos en los años 1720 a 1736. 1.—El problema del personal fue siempre candente en la misión de los Llanos, ni tuvo tampoco fácil solución puesto que eran varios los factores que en ello influían, lo que en más o menos proporción sucedió en la generalidad de las misiones. Por otra parte los misio- neros que constituyen siempre las avanzadillas de la Iglesia y casi podíamos añadir que de la civilización, no podían darse por satisfechos con lo hecho. Además, una ley ordenaba que los pueblos ya debida- mente formados con sus indios suficientemente instruidos, fuesen en- tregados al obispo pasado cierto número de años que primero fue fi- jado en veinte y posteriormente se redujeron a diez. Todos esos motivos influyeron notablemente en el ánimo de los misioneros de los Llanos de Caracas para tomar, llegado este año de 1720, una determinación concreta sobre los pueblos que tenían a su cargo. Aunque no escaseaba el personal, no abundaba tampoco y se hacía necesario emplearlo en las entradas a la reducción de los indios, las que, a medida que pasaban los años, se repetían con mayor fre- cuencia, lo que obligaba a dejar los pueblos poco atendidos durante esos dos o tres meses empleados en tan importante tarea. Para inten- sificarlas, no quedaba otro remedio sino el de hacer entrega de los más adelantados al obispo para que en elos pusiese sacerdotes seculares. Fue en 1702, según se dijo, cuando el P. Marcelino de San Vicente propuso ya la cesión de cuatro pueblos y dos villas, lo que,