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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN LOS LLANOS DE CARACAS 89 El P. Ildefonso de Zaragoza arribaba a Caracas, de vuelta de España, el 18 de diciembre de 1693; poco después, parece ser que a primeros de enero del siguiente año, fue elegido Prefecto aun antes . de llegar a los Llanos.` Aprovechando su estancia en Caracas, trató con el obispo y gobernador de poner en ejecución el contenido de las cédulas por él conseguidas. Y, después de la junta habida el 20 de febrero del expresado año 1694, el gobernador daba su decreto por el que ordenaba a las justicias de San Sebastián de los Reyes, Guana- guanare y villa de San Carlos de Austria y a las demás ciudades y lugares inmediatos a las misiones, que en modo alguno impidiesen las entradas de los misioneros a la reducción y conversión de los indios infieles, apóstatas y fugitivos de los Llanos de aquella provincia, sino que por el contrario les diesen toda la ayuda que necesitasen y ade- ITIS escolta de españoles armados, disponiendo también que los indios así sacados y reducidos podían ser distribuidos entre los españoles que hiciesen las entradas, todo en conformidad de lo prescrito por el rey en sus cédulas.26 Igualmente, tras otra solicitud del P. Ildefonso, disponía el gobernador Francisco de Berroterán que "en todos los pueblos de indios que están debajo de la doctrina y enseñanza de los religiosos de dichas misiones, en cada un año se nombren un gobernador, dos alcaldes y dos regidores".` Nada decimos sobre otras determina- ciones que entonces se tomaron, de las que luego trataremos. La actuación del P. Zaragoza prometía ser eficaz y fructífera al ocupar el cargo de Prefecto, y así fue en realidad. Lástima que no pudo contar con todos los religiosos que al tomar el cargo se encontraban en aquella misión de los Llanos. Porque a los pocos meses partieron para Maracaibo los PP. Buenaventura de Vistabella y Antonio de 011ería con el Hno. Fr. Gregorio de Ibi en fuerza de una cédula del 6 de Ibi, pero no llegaron a la Ciudad del Lago hasta el 4 de junio de 1694. En septiembre marcharon al campo de apostolado y hacia el 14 de septiembre fue muerto por los indios coyamos Fr. Gregorio de Ibi; poco después falleció también el P. Antonio y el P. Vistabella marchó a incorporarse a los religiosos de su provincia destinados a la nueva misión de Santa Marta. 25. Carta del P. Ildefonso al rey, 12 marzo 1695 (AGI, Santo Domingo, 801). 26. Petición del P. Ildefonso y auto del gobernador, Caracas, 20 febrero 1694 (AGI, Santo Domingo, 808). 27. Petición del P. Ildefonso y auto del gobernador, Caracas, 22 febrero 1694 (Archivo de la Academia Nacional de la Historia, de Caracas, Bulas y Reales cédulas (1705-1754), ff. 131-134, Cota y-lOO).