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MISION DEL CARONL—CAPITULO y 123 En el mismo mes de junio empezaron a llegar a Caracas los Misioneros que estaban esperando en las diferentes casas de la Custodia. Eran éstos los siguientes: RR. PP. Santos de Abelgas, Samuel de San Mateo (1), Angel de Lieres, Nicolás (le Cármenes, Inocencio de La Antigua, Dionisio de Curillas, Benigno de Fresnellino, Bonifacio de Olea y Justino de Villa- res, y los Hermanos Fray Saturnino de Bustillos, Fr. Faustino de Lieres, Fr. Rogerio de Vaiduvieco y Fr. Balbino de Caracas; con los dos que acompañaron al Vicario Apostólico, son diez Misioneros sacerdotes y cinco Hermanos. En noviembre del mismo año 1924, llegaron de España para el Vicariato los RR. PP. Luis de León, Tomás de Graja! y Félix de Vegamián. Terminamos este capitulo insertando una carta del M. R. Padre Félix de Vegamián, que fué el gestor incansable en todo este asunto del Vicariato del Caroní, pues fué el encargado por los Superiores para tratar con el Gobierno de Caracas la manera de llevar a la práctica el hermoso Proyecto de las Mi- siones, llegando como hemos visto, a firmar un contrato, apro- bado por la Sagrada Congregación Consistorial. La carta es del tenor siguiente: "Muy Reverendo Padre: Recibí su carta, quedándole muy agra- decido por su estimable felicitación. En esta ocasión, más obligado que nunca, debo decir: Sea todo para mayor gloria de Dios. Ya se habrá enterado de la solemne Consagración (le nuestro primer Vicario Apostólico; la concurrencia fué numerosa y selecto y quedó compla- cida y entusiasmada, y nosotros mucho más y con mayor razón. A principios de junio salió el Ilmo. Sr; Vicario del Caroni, acom- pado del P. Crisóstomo de Bustamante y de Fr. Darío de Renedo, para la Guayana o territorio de la Misión; fueron muy bien recibidos y se establecieron en Upata, capital del Distrito. Las noticias que nos Comunican por telégrafo son satisfactorias. Aquí están ya reunidos los Religiosos Misioneros que han de for- mar la primera expedición, y, gracias a Dios, están contentos y muy anhuados; probablemente soldrán para su destino a fines (le este mes o principios del qie viene. Entretanto, nos ocupamos todos en aprovi- sionarlos de las cosas necesarias: de hamacas, mosquiteros, ropas de cama y útiles de cocina y refectorio. (1) Los RE. PP. Santos de Abelgas y Samuel de S. Mateo y Fray Saturnino de Bustillos, se encontraban ya hacía varios años en Tucupita y resto del Bajo Orinoco, incluido todo él en el Vicariato.

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