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74 LOS FRANCISCANOS CAPUCHINOS EN VENEZUELA resolvió se escribiera al Obispo de Puerto Rico, para que visi- tase esa parte de su Diócesis e informase de lo sucedido; el cual presentó un razonado informe al Consejo de Indias so- bre lo acaecido en la Misión de Cumaná, y escribió a la Rei- na la siguiente carta, que es un avance del informe que es- taba preparando (1): "Señora. Por Cédula de ocho de Junio de 1673, se sirvió Vuestra Majestad mandarme, atienda mucho al reparo de los daños que han causado los indios levantados contra las Misiones de Capuchinos de las Provincias de Cumaná, cuyo Prelado es Fr. Agustín de Frías, y que procure la reducción de los indios por los medios más suaves, y que dé cuenta a Vuestra Majestad de lo que fuere obrando. Y obedecien- do, doy cuenta a Vuestra Majestad de lo que juzgo necesario, dejando el informe más dilatado para la vuelta de flota. La razón, Señora, del bien 'o mal de la reducción de los indios no nace de ellos, pues, aunque son brutos, sufren como tales; ni de los religiosos, que cada uno es un S. Francisco en el monte Alberne (ha- blo lo que he visto). La codicia (en quien no debiera estar) es la raíz tan profundamente arraigada, que sin mano regia no se arranca- rá; pues el cayado Episcopado lo pisan, o lo quiebran. Hoy necesitan estas Misiones Capuchinas de mayor número de religiosos, porque, so- bre la población de Santa María, han fundado una en Mapuey, y están fundando otra en Chuparipar; los indios (le ambas están reducidos por el incansable celo de dichos religiosos, a los cuales así religiosos como indios de Mapuey y Chuparipar vi, pasando cuatro leguas de Mapuey, por el mismo valle (le Chuparipar, cuando fui a la Trinidad, y volveré cuanto antes a confirmarlos, ayudándome Nuestro Señor. Convendrá a vuestro lleal servicio, mandar a los religiosos Capu- chinos de vuestra Corte de Madrid que en ella tome uno a su cuidado el regimiento de estas Misiones en lo perteneciente a la regla y cons- tituciones de su profesión, y al aumento espiritual y temporal de ellas, por cuanto el Provincial de Capuchinos de Andalucía, que es su Co- misario General, con las muchas ocupaciones de su Provincia no ha (1) Relación cit., pág. 100; Anguiano, Crónica, pág. 135, "Fray Bartolomé García de Escañuela. Franciscano, Electo por el Papa Clemente X, dió poder al Presidente del Cabildo eclesiástico de esta Diócesis para que tomara posesión de la Sede, en su nombre, como lo hizo en 27 de Abril de 1671, y luego él personalmente a su llegada, el día 24 de Agosto (le 1673. Ordenó la formación de un cen- so estadístico de esta ciudad, que es el único que poseemos del siglo XVII, y que lo hizo por su mandato el Cura Párroco Don Juan Guilar- te de Salazar. Promovido a la Sede (le Durango, en Méjico, y estando ausente el señor Escañuela, por la noticia oficial, que de ello tuvo, el Cabildo eclesiástico declaró este Obispado, Sede Vacante, el día 5 de Junio de 1676". (Sínodo Diocesano de Puerto Rico de 1917, ya cit., página 142).