BCCCAP00000000000000000000504

396 LOS FRANCISCANOS CAPUCHINOS EN VENEZUELA Por eso el Rey los rechaza todos estos capítulos, en la Cédula 3 de diciembre de 1775, y les pone las limitaciones contenidas en las leyes y privilegios anteriores: "Sobre el cuarto, dice la Cédula, he resuelto que la contribución de que en él se trata sea solamente un cuartillo, siempre que se pase por puente o canoa, comprendiéndose en esta contribución las' car- gas o recuas de los religiosos Capuchinos, pero exceptuándose la de los Indios pacíficos. En cuanto al quinto, es mi voluntad que en todos los tiempos en que sea preciso usar de la canoa por no dar vado el Río del Palmar, satisfagan los que transitasen medio real por cada carga y persona exceptuando las personas así de los Religiosos Misioneros como la de los Indios y las cargas de estos últimos. El diez y siete le he negado rotundamente, y mando que en el punto de remoción de Religiosos se proceda con arreglo a lo que previenen las leyes"... Cuando llegaron estas órdenes del Rey, llevaban ya los Misioneros mucho tiempo de brega y estaban demasiado ofendidos, e imitaron a las palomas que, cuando se las per- sigue y molesta en un campo, remontan el vuelo y se trasla- dan a otro donde se las deja vivir tranquilas; así hicieron nuestros Misioneros de los indios Mocoas en las Sierras de Perijá; hostilizados de quien por razón de su oficio estaba obligado a protegerlos, levantaron el vuelo y busca- ron dentro de su jurisdicción un nuevo centro de Misiones entre el río Escalante y Villa de Gibraltar, al Sur del lago de Maracaibo para reducir y adoctrinar los indios Motilones que moraban aquellos bosques, donde fundaron en poco tiempo diez poblaciones florecientes que aun se conservan la mayor parte. Ya hemos dicho que para el año 1745, según él informe del P. Silvestre de Vata, tenían los Misioneros en la Sierra de Perijá, varios pueblos: Piche, Apón, Atacoa, Naranjo, Mi- nocoa, Timacoa, y otros, que después llegaron a diez, de los cuales sólo queda Apón, o sea Maehiques de la ribera del río Apón. 4. En un informe que dió el 13 de octubre de 1760 el Párroco del Rosario de Perijá, D. Antonio Nicolás de Andra- de, a petición del M. R. P. Adrián de Los Arcos, Prefecto de • • - •

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz