BCCCAP00000000000000000000504

MISION DE GUAYANA.—CAPITULO XIII 333 so y Requena, Con ¡nil sesenta y dos indios.—Día 24. Se reci- bió un oficio de Guasipati con sesenta y tres indios reclutas que se han agregado a los batallones. Pero ¿para qué seguir, si la orden que llevaban los comisionados de cada departa- mento era alistar a todos los indios desde la edad de catorce años en adelante? 5. Con estas extorsiones, ¿qué extraño es que los indios , de la Misión de Murucure se fueran en masa a los montes? Así lo hace constar el general Piar en su diario. El día 30 de mayo, y con fecha 14 de octubre, se lamenta el general Bo- livar de la fuga a los montes de los indios de Tupuquen, y le encarga al señor Blanco que, con el escuadrón de Guías, trate 1 de reducirlos de nuevo, y que tranquilice a todos los indíge- nas de que los ochocientos hombres reclutados últimamente y todos los indios del Caroní, que habían sido incorporados en el ejército, volverían tan pronto como sea tomada la ciudad de San Fernando, que está ocupada por el ejército español (1). Tan frecuentes y numerosas conscripciones barrieron la población masculina de las Misiones, y los pueblos fueron a- bandonados, huyendo a los montes los pocos indios que que- daron, COfl sus mujeres e hijos. En documentos oficiales consta que los indios de Murucure y Tupuquen huyeron en masa a los bosques; los de las otras Misiones se fueron reti- rando por parcialidades y esto desde el mismo día de la ocu- pación, pues hay dos proclamas o manifiestos de Piar excitan- do a los indios a volver a sus hogares (2). 6. Hemos contemplado en los capítulos el rápido desen- volvimiento de las Misiones del Caroni, tanto, que causó gran- de admiración al mismo general D. Manuel Piar, que comenzó u Memorias de O'Leary, t. XV, p. 342, (2) Memorias de O'Leary. p. 129 y siguientes, Véase la siguiente orden (le Piar, del 16 de abril (Tavera Acosta, 101): "Tres días hace hoy que no se raciona al exercito por falta de carne. Dos mas haría si no hubiese trnnaclo las vacas de leche que había en Caroni. para que comiera el 12 y 13.,. Pero no son estos so- los males que han traído la demora y negligencia de los Comisiona- dos para executar mis mas simples órdenes. La espantosa deser- ción de mas de 220 indios me hace temer que se dispQrsen todos los reclutas fatigados del hambre... y>