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MISION DE GUAYANA.—CAPITULO VII 229 gozan: hatos de ganados que poseen: y lo muy importantes que son es- tas Misiones, igualmente se dice lo que son las de los Jesuitas u Obser- vantes de Píritu en esta provincia, cuyos tres cuerpos evangelizan en ella (1). Cuerpos de Misiones que evangelizan en la provincia de Guayana. En esta provincia de Guayana es predicado el Evangelio por tres cuer- pos de Misión de distintas Religiones y son: los RR, PP. Capuchinos Catalanes: los RR, PP. Jesuitas de la provincia de Santa Fe, y los PP. Observantes de Piritu; a cuyo cargo están todas las Doctrinas y Misio- nes de la provincia de Barcelona, como queda dicho. De estos tres cuerpos de Misión se tratará en esta nota separadamente, y se expre- sarán los pueblos que cada uno sirve y los progresos en ellos. Misioneros Capuchinos Catalanes. Los Capuchinos del reino de Cataluña mantienen en esta provincia una comunidad de Misioneros, quienes, costeados por el Real Erario, se transportan desde su provin- cia hasta inco'rporarse en esta Misión; todos los existentes en ella nom- bran cada tres años un Prelado, con el nombre de Prefecto; pero ni éste ni la comunidad están subordinados al Provincial (le Cataluña, y si al Provincial de la provincia de Andalucía, su único Prelado. Esta expresada comunidad ejerce su ministerio con impondera- ble aplicación, buen orden e igual acierto, para lo que no rehusan nin- gún trabajo, y mediante esto consigue los felices progresos que se re- conocen en las Misiones de su cargo, las que comenzaron a establecer en el año 1724, sin embargo de haberlo intentado antes algunos otros Misioneros. Infiérese esto por un libro de bautismos, en el que consta que desde el año 1664 entraron varios sacerdotes y en distintos tiem- pos a la pacificación y reducción de estos indios, como fueron el P. José Sampayo, religioso del Orden de Santo Domingo; el P. Manuel de la Purificación, descalzo de San Agustín; los clérigos D. Francisco de Rojas, don Miguel de Angulo, don José de Figueroa y el Racionero don Andrés de Hernández; los PP. Jesuitas Dionisio Melend, Francis- co Llauri, Julián Vergara e Ignacio Cano; los Capuchinos catalanes Ir. Angel de Mataró y Pablo de Blanes. A estos dos Capuchinos y demás hicieron los PP. de la Compañía renuncia de las dichas Misiones, la que autorizó el Gobernador de la Trinidad D. Tiburcio J. Aspe y Zú- ñiga el año 1681, como consta de dos Reales Cédulas de 7 de febrero de 1686 y 29 de abril de 1687, por las que aprueba Su Majestad la re- nuncia hecha por los Jesuitas y destina a los religiosos Capuchinos Catalanes para las Misiones de la provincia de Guayana, cuyas dos Cédulas paran en los Archivos de la Comunidad. Desde dicho año de 1687 las tomaron a su cargo y comenzaron a trabajar dichos Capuchinos, pero eran tantas las miserias y muertes de los religiosos, sin ser socorridos en sus desamparos, especialmente (1) Lo referente a estas dos Misiones lo insertamos en el tomo 111