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MISION DE LOS LLANOS.—CAPITULO IV 93 Hemos sabido también que algunos religiosos desempeñan car- gos y comisiones de los señores Obispos, y que son ajenas a su carác- ter de Misioneros, apartándolos del cumplimiento de su santo minis- terio de las Misiones; para cortar este abuso, prohibimos que en ade- lante ningún Misionero se encargue de comisiones o empleos ajenos a la misión para que fueron enviados a las lndias.—Madrid, 27 de agos- to de 1676.—Yo, el Rey. Por mandato de Su Majestad, Antonio Vacas, secretario (1)". Con la misma fecha de esta Real Cédula se despachó la otra a que hace alusión, dirigida al P. Prefecto de las Misiones, y dice así (2): 2. "Fray Francisco de Puente ha presentado en vuestro nombre un Memorial acerca del estado de las Misiones, y la entrada que hi- cieron los franceses por el río Guarapiche, destruyendo la población de San Carlos (3) y otras reducciones de indios; y me suplica mande que pasen a formar una población algunas familias de las islas Cana- rias, y se conceda a los españoles que ayudan a sacar los indios, que algunos de éstos les sirvan tres (lías en la semana, y, además, pide que se envíen diez religiosos para atender al servicio de las Misiones. Habiéndose vi-vio el Memorial en el Consejo (le Indias, he manda- do, por Despachos de esta fecha, al Capitán General de Canarias, que procure mandar algunas familias a Cumaná, para que formen pobla- ción, y al Gobernador de esta ciudad, para que les señale tierras de labranza para el sustento; y que los indios que se saquen de los mon- tes, con auxilio de los españoles, les sirvan algunos tres días a la se- mana en los ministerios que les están señalados, y que tengan de ca- torce a sesenta años, cumpliendo los españoles las condiciones estipu- ladas en los Despachos que he remitido a Caracas y Cumaná, encargan- do con todo aprieto a los Gobernadores y Obispos que cuiden mucho del buen tratamiento de los indios y de su doctrina y ensefianza y que sean tratados benignamente, ayudando por su parte los vecinos a la reducción de los referidos indios. (4). A vos, como Prelado de esa Misión, y al que os suceda, encargo y mando que, por las presentes, hagáis lo mismo, procurando descargar mi Real conciencia en este asunto tan delicado. (1) Biblioteca Nacional de Madrid, sig. 3.561. D. 38. (2) Idem, documento 40. (3) No se confunda este San Carlos destruido por los franceses cerca de Cumaná con la villa de San Carlos de Austria, de cuya fun- dación trataremos en el capitulo siguiente. (4) Estas palabras las hemos subrayado nosotros, para que se vea el interés que tenían los Reyes de España en que fueran bien tra- tados los indios.

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