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60 LOS FRANCISCANOS CAPUCHINOS EN VENEZUELA Espero que con este refuerzo continuareis y llevareis muy ade- .lante los trabajos emprendidos, procurando que con vuestro ejemplo todos los religiosos (le esta Misión se alienten en nuestro espíritu a la reducción de los indios, pues el principal medio de conquistarlos ha de ser por la enseñanza práctica del ejemplo de obreros desinteresa- dos y atentos sólo al mejor servicio de Nuestro Señor. Preparaos, pues, con mucho fervor, Vos y todos los religiosos que estén a vuestras órdenes, a fin (le que se dilate por esas provincias nuestra sagrada Religión; de manera que en la conquista espiritual en que entendiereis se consiga el fruto que yo tanto deseo, por el mayor .servicio de Dios y bien de las almas, de cuyo mérito también parte os tocará a vosotros. De vuestra virtud lo fío, de que con ansias muy fervorosas lo procuréis. Del recibo de este Despacho me daréis aviso en la primera ocasión que se ofrezca. San Lorenzo de El Escorial, 26 de octubre de 1662. —Yo, El Rey.— Por mandato de Su Majestad, Pedro Medrano.—Es copia del original, Tomás Ponte". 10. El Despacho Real dirigido al Provincial de Andalu- cia, P. Francisco de Jerez, dice (1): "El Rey.—Teniendo en cuenta el gran fruto que los religiosos de vuestra Orden han hecho en las Indias Occidentales, por la Misión que fué para la reducción de los indios Cumanagotos, y visto por mi Consejo de Indias el informe presentado por los religiosos, Fr. Agustín le Frías y Francisco de Tauste, he resuelto se vuelvan a las Misiones con doce religiosos más para continuarlas. Y como conviene que haya un Comisario general de esa religión que tenga cuidado de esas Misiones, por las presentes os encargamos de ellas (2); y en caso (le que se divida la provincia, seria Comisario el que se queda en Sevilla, por la circunstancia del Puerto; y pondréis 'muy particular atención en que los religiosos que hubieren de pasar a las indias con Fray Agustín de Frías y Fr. F'rancisco de Tauste, sean sujetos de toda aprobación, y espero que concurrirán todas las partes de virtud y letras que se requiere para fin tan alto, en que ha de in- teresarse tanto el servicio (le Nuestro Señor. Y siendo tan necesario y conforme a las operaciones en que han de entender dichos Misioneros y Apóstoles, espero que con esa aten- (1) Biblioteca N. de Madrid, sig. 3.561. Núm. 21. (2) Este nombramiento fué confirmado por el Reverendísimo Padre General de la Orden Capuchina.
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