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168 LOS FRANCISCANOS CAPUCHINOS EN VENEZUELA • 12. Importante Cédula Real en que se manda poblar a los indios alzados, negros y mestizos que viven en los inon- tes(1): "Mi Gobernador y Capitán General de Caracas: Fr. Marcelino de San Vicente, Prefecto de las Misiones de Los Llanos, me ha repre- sentado que siendo así que consta que en doscientas leguas no hay más que catorce pueblos de españoles, resultando este corto número de haber muchos negros, mulatos y pardos por los montes, hacien- do una vida escandalosa, más reprobable que la de los mismos indios gentiles, cometiendo gravísimas ofensas de Dios sin señal exterior de la religión Católica, pues viven y mueren como bárbaros en los montes. Ha propuesto que seria del servicio de ambas Majestades y reme- dio de las almas, se manden poblar y reducir a vida regular y polí- tica, excepto los que tuviesen haciendas formales, pues éstos tienen capellán que les administre los Santos Sacramentos. Propone, como medio de realizar la empresa, que dé Orden a su Religión y a las otras que quisieren tomar parte y emplearse en predicar Misiones por toda la provincia, en conformidad con lo por mí resuelto en Cédula de 21 de mayo del año de 1677; encargando a las Religiones la doctrina de los pueblos, en el interin que haya clé- rigos que las sirvan. Habiéndose visto en mi Consejo con el informe del Fiscal, y con- siderándose conveniente y conforme con le dispuesto por repetidas leyes y ordenaciones, que no se permitan semejantes gentes vagas y perdidas en los montes, He resuelto ordenaros y mandaros que sea el primer cuidado el reducir y poblar, con separación de naciones, a los que estuvieren en la conformidad mencionada, viviendo bárba- ramente en los montes, y que a este fin apliquéis todas las providen- cias necesarias, dando las órdenes convenientes a todos los ministros de vuestra jurisdicción para que cada uno ejecute lo que toque a su territorio. Disponiendo que se publique bando en todas partes, amonestando a los españoles, mulatos y negros libres, que se reduzcan a población, valiéndose de los mismos Misioneros para el intento; y si después de amonestados y solicitados, no pudiereis lograr el fin de su pobla- ción, os valdréis de todos los medios que consideréis y tuviereis por más acreditados, efectivos y eficaces para que se vea conseguida una obra tan del servicio de Dios y mío. A los que no quisieren sujetarse a vida regular, siendo españoles, mestizos o mulatos, los castigaréis severamente, aplicándolos al ser - (1) Biblioteca Nacional de Madrid, signatura 3.561, D. 160. •

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